CIPOLLETTI (AC).- En lo que significa una toma de posición no muchas veces vista, y que podría generar polémicas con familiares o allegados de presuntos damnificados por la posible mala práctica de la profesión, el Colegio Médico de Cipolletti salió en defensa de sus afiliados. Expresaron que que quienes intentan demostrar "que en esta ciencia existe la perfección lo único que hacen es menoscabar una de las labores más difíciles de ejercer" y arremetió contra los que a su criterio se manejan con "vedettismo mediático" en casos en los que no se han probado culpabilidades.

"Nadie intenta disfrazar la responsabilidad que conlleva esta difícil profesión ni pretende enarbolar banderas de impunidad y de injusticia, pero sí aspira a tener un proceso con justicia y responsabilidad sin caer en el vedettismo mediático buscando acercar resoluciones que no estén juzgadas ni presentan dictamen de culpabilidad", dice el escrito del colegio firmado por su presidente, Rubén Mombrú.

La cita parece una alusión concreta a la noticia del procesamiento del médico ginecólogo Enrique Ricciuti -la novedad la confirmó hace poco el abogado de la parte querellante, Gustavo Lucero, ante una consulta periodística concreta- por homicidio culposo, dictado por la jueza Alejandra Berenguer. Esto fue en relación al deceso de una criatura de sólo seis horas de vida en un hecho que comenzó con la extracción de un DIU a su madre en el quinto mes de gestación, rotura de bolsa, cesárea, muerte de la beba, denuncia y otros trámites que culminaron con el procesamiento.

"Todos tenemos el derecho a la defensa y a un juicio justo, sin juzgamiento previo", dice Mombrú (Ricciuti cuenta con abogados de primer nivel regional, el fallo de Berenguer es de primera instancia, habrá apelación a Cámara y si no prospera. juicio oral y público) agregando que "nosotros los médicos no somos criminales comunes, ninguno de nosotros huye ni elude la responsabilidad que emana de nuestro ejercicio profesional".

"Qué criminal se queda, se presenta a un juicio, contrata un seguro por las dudas que no salgan las cosas como pretende. Por favor, no estoy a favor de los delitos en cualquiera de sus manifestaciones pero asumamos que todos sabemos que la medicina es una ciencia inexacta, en continua expansión, que la verdad de hoy es una mentira de mañana", enfatiza entre otras cuestiones el titular del Colegio Médico de Cipolletti.

Siguiendo con su análisis -y su encendida defensa de los facultativos en problemas legales y éticos- explicita Mombrú que la medicina también "es una ciencia altamente probabilística que se guía por estadísticas, que trabaja con una materia especial que tiene cuerpo y espíritu, que presenta tantas variables que es imposible conocer todas y que, por lo tanto, el profesional tiene que conjeturar utilizando su conocimiento y su experiencia para definir cuál es el diagnóstico más acertado y cuál el mejor tratamiento".

Ya en los tramos finales del escrito, Mombrú reconoce que cada día es más difícil "ejercer sin temores" la profesión. "Respeto profundamente el dolor de la ausencia de un ser querido. Quienes pasamos por ello no podemos describir el sentimiento tan profundo, imposible de calificar".