BUENOS AIRES (DyN) - El Gobierno no descartó ayer que el sector de Luis Patti esté vinculado con el secuestro de Luis Gerez, y aunque admitió no tener pruebas para culpar al ex subcomisario bonaerense o a su entorno, deslizó que la base de la novela policial es: "Dime quién se beneficia con el crimen y te diré quién es el asesino".
"Lo que está claro es que lo que se buscaba conferir era que no siguiera testimoniando en la causa Patti", añadió Fernández, en referencia al albañil -aparecido anoche con vida tras dos días de ausencia-, cuya declaración ante el Congreso fue clave para que el ex policía no asumiera la banca como diputado para la que había sido electo en octubre pasado. Fernández pidió "investigar e ir a fondo" en esta dirección, al reflexionar que "el hecho de que haya sido secuestrado y lo hayan hecho desaparecer por 48 horas a un testigo de cargo de Patti da que pensar".
En abierta réplica, el ex intendente de Escobar sugirió que, contrariamente a las voces oficiales, "partidarios del Presidente" Néstor Kirchner podrían estar detrás de la desaparición de Gerez, quien milita en una organización social oficialista en ese distrito al noroeste del conurbano.
"Desafío y le exijo (a Kirchner), como presidente de un partido político defensor de la Constitución y de las instituciones republicanas, que diga qué ideología tienen los autores del secuestro, de dónde provienen y a ver si los detienen, y quiénes son. Cuidado, a ver si son de ellos", advirtió Patti, líder del Paufe.
Patti consideró, por radio América, que pudieron haberle hecho "comer un garrón" a Kirchner; sostuvo que el hecho es "demasiado burdo" e "infantil", y se preguntó: "¿y si fue la izquierda y simpatizantes del Gobierno, qué va a decir el Presidente?".
En tanto, en declaraciones a las radios Mitre y 10, el jefe de Gabinete instó a la Justicia a acelerar las causas contra los represores, al afirmar que "muchos de estos personajes" que secuestraron a Gerez "se envalentonan por la demora" de los magistrados en dictar sentencias.
Convencido de que el ataque contra el albañil fue "extorsionar a Kirchner para que cambiara el rumbo", Fernández alertó que "si la justicia fuera más rápida para sancionar a quien corresponda", terminaría con "la locura de algunas mentes que creen que si secuestran a un testigo, la causa se va a frustrar".
También advirtió que los "grupos parapoliciales o paramilitares", responsables del secuestro de Gerez, fueron impulsados por un "discurso complaciente" similar al de "un sector muy vasto de la política" que, afirmó, suele exhortar a Kirchner a "dejar de alimentar el pasado y buscar una reconciliación de los argentinos, garantizando la impunidad". Fernández reconoció que en el Gobierno nacional "no tenemos datos firmes" de que Patti o su entorno hayan estado detrás del secuestro de Gerez, quien denunció haber sido secuestrado en 1972 en una comisaría de Escobar y que, por la voz, logró reconocer al ex subcomisario como uno de sus victimarios. Sin embargo, el jefe de Gabinete recordó llamativamente que "hay un principio rector de la novela policial que dice: 'dime quién se beneficia con el crimen y te diré quién es el asesino'". "Me da la impresión de que es una intimidación directa a Gerez para que no siga hablando de lo que le podría caber a Patti en un hecho tortuoso, eso hay que investigarlo", dijo.