CENTENARIO (AN).- En un confuso episodio calificado en forma previa como presunto suicidio, un joven efectivo de la policía murió de un disparo en la cabeza efectuado con su arma reglamentaria mientras estaba en su casa.

El hecho ocurrió domingo último alrededor de las 8 de la mañana en la vivienda del policía ubicada en pleno centro de Centenario, a pocas cuadras de la comisaría Quinta.

El agente, de 25 años y cuya identidad se mantiene bajo reserva, recibió un balazo en la cabeza mientras estaba en la vivienda con su esposa y una compañera de la fuerza.

Fue derivado a una clínica privada de la capital neuquina, en la que falleció mientras era intervenido quirúrgicamente.

La principal hipótesis que manejan los investigadores del caso es la de presunto suicidio.

"La autopsia arrojó resultados en esa dirección", indicaron las fuentes policiales consultadas por "Río Negro".

Pero también "hay algunos detalles que no terminan de cerrar del todo y por eso no se descartan otras hipótesis", se

ñalaron sin dar mayores detalles.

La investigación quedó a cargo del juez de instrucción Juan José Gago y de la fiscalía de Graves Atentados contra las Personas que encabeza Sandra González Taboada.

El agente muerto trabajaba en un destacamento de las inmediaciones de Centenario.

En principio, habría estado solo junto con su esposa y la compañera de trabajo en la vivienda cuando se detonó el arma.

Tampoco trascendió si el efectivo atravesaba algún tipo de problema personal que lo hubiera determinado a tomar la decisión de dispararse.