Buenos Aires (DyN) - Los crímenes de la Triple A fueron de lesa humanidad y por lo tanto imprescriptibles, determinó el juez federal Norberto Oyarbide, en un fallo que abre la puerta al juzgamiento de los responsables de los cerca de 1500 homicidios cometidos durante el gobierno de María Estela Martínez de Perón.
La decisión del juez Oyarbide se activó tras la captura la semana pasada en España de Rodolfo Almirón, uno de los jefes de la organización que tenía pedido de captura desde 1984, y quien ahora sería extraditado a la Argentina. Si bien los crímenes fueron cometidos antes de la implementación de la dictadura militar, el Estado argentino había reconocido su responsabilidad en los homicidios de la Triple A al disponer las indemnizaciones para los familiares de las víctimas del terrorismo que antecedió el golpe de 1976.
La Fiscalía a cargo de Eduardo Tainano había pedido que se reabriera la investigación sobre por lo menos ocho de los secuestros y asesinatos de la Triple A, y denunció que fueron llevados a cabo por un grupo que actuó bajo el paraguas de la estructura oficial, atentando contra "la concepción humana más elemental". Aquel pedido, hecho el año pasado, le permitió ahora al juez Oyarbide pronunciarse sobre la cuestión y abrir el juzgamiento para estos secuestros y homicidios. Entre esos crímenes figuran los del diputado Rodolfo Ortega Peña, el ex subjefe de la policía bonaerense Julio Troxler y del profesor Silvio Frondizi, hermano del ex presidente.