CIPOLLETTI (AC).- Los habitantes del barrio Puente de Madera cortaron el puente carretero por unas ocho horas para reclamar que clausuren la planta de líquidos cloacales que funciona a pocos metros de ese sector cipoleño.
La gestión de los abogados que los patrocinan logró que la protesta se traslade a la sede que ARSA -la operadora de la planta- tiene en esta
ciudad.
Desde hace poco más de un mes que las lagunas de tratamiento entraron en funcionamiento. Los vecinos denuncian problemas de salud sobre todo entre los niños y los ancianos que viven en el barrio, y un "olor insoportable".
Los abogados Mariano Rossi y Cecilia Saraceni -representantes legales de los vecinos- prometieron realizar mañana un amparo
judicial para que "se busque una solución definitiva" y esto logró distender los ánimos.
En este momento los manifestantes permancen en la sede de ARSA esperando una respuesta de las autoridades de la empresa. Las casi 60 personas que se manifestaron advirtieron que si en 48 horas las soluciones no llegan volverán a cortar el puente.