Después de cinco caídas consecutivas, Quilmes le ganó el clásico a Peñarol, por 83 a 82, y rompió la paternidad de los "milrayas" en la Liga Nacional de Básquetbol, que tiene a los equipos marplatenses como punteros de la segunda fase.
Quilmes necesitaba un triunfo como el conseguido en el polideportivo "Islas Malvinas", con un doble y simple de Sebastián Ginóbili, a tres segundos del final.
La punta de los dos equipos marplatenses no hace más que ratificar el buen momento que viven ambos equipos, y que son los que mejor básquet están jugando.
Peñarol parecía que se cortaba solo en la punta, pero una caída sorpresiva en Madryn ante el Deportivo y la de antenoche con los "cerveceros", hacen pensar que no es tan imbatible como parecía.
En cambio, Quilmes, con sus siete victorias al hilo y un nivel en alza demostró que punta no le queda nada mal.
La victoria de Quilmes no fue sencilla. A falta de apenas tres minutos pudo pasar al frente por primera vez. Luego Peñarol se repuso, aprovechó algunas apariciones de Jason Osborne y con 12 segundos por jugar todavía ganaba por uno (81-80).
Sin embargo, una muy buena jugada de Ginóbili, con doble y falta le permitieron a Quilmes festejar la victoria.
En los otros partidos: Boca Juniors 73 Libertad 68; Central Entrerriano 89 Deportivo Madryn 79; Estudiantes (Bahía Blanca) 73 Obras Sanitarias 60; Regatas Corrientes 98 Quimsa 86; Belgrano 74 Gimnasia (Comodoro Rivadavia) 84; Ciclista Juninense 73 Ben Hur 80, y Sionista (Paraná) 78 Atenas 72.