El Real Madrid despidió el año dejando una imagen mortecina y ayer la mayoría de las miradas se dirige hacia Fabio Capello, su técnico, que pasó al banquillo de los acusados en cuanto los resultados le abandonaron. Gonzalo Higuaín lo veía y oía todo desde un palco del Bernabeu. El Real Madrid cayó el miércoles por un humillante 3-0 ante el Recreativo de Huelva en un día en el que se hizo patente el divorcio entre la hinchada y el equipo.

"Este resultado pone en solfa el crédito de Capello, que como sólo ofrece resultados, cuando se queda sin éstos se queda sin nada. Pone en solfa a Ramón Calderón, su presidente. Pone en solfa los nuevos fichajes, de repente suenan a parches. Lo pone en solfa todo", resume ayer el diario "As".

Capello criticó a sus futbolistas al término del partido: "Jugamos sin fuerza, sin ganas, sin calidad. Hubiera tenido que cambiar a los 14 jugadores". Pero pocos se fijan hoy en los jugadores, y los principales destinos de la crítica son el entrenador y el proyecto deportivo. El Real Madrid sumó la cuarta derrota en la Liga, las mismas que sumó hace 10 años en toda la temporada durante la anterior etapa de Capello en el club blanco.

El entrenador italiano está bajo sospecha por dos razones: ahora ni da espectáculo ni gana. Lo primero fue una constante durante toda la temporada, aunque quedó anestesiado hasta que los resultados aguantaron.

El proyecto del club está bajo sospecha después de que se gastara más de 90 millones de euros (118,5 millones de dólares) en unos fichajes que están siendo muy criticados. Por el momento, la afición desconfía de hombres como Emerson, Diarra y . De hecho, muchos comienzan a cuestionar las recientes incorporaciones de los argentinos Gonzalo Higuaín y Fernando Gago, al entender que los más de 35 millones de euros que el club pagó por ambos es excesivo porque se invirtió en promesas, no en jugadores contrastados en Europa. ¿Qué pasará con las joyas argentinas? Difícil saberlo tratándose de dos jóvenes que apenas tuvieron tiempo de hacer pie en sus clubes de donde se fueron amados por sus hinchas.