ROCA (AR).- En el último mes se conocieron dos casos del Síndrome Urémico Hemolítico (SUH) en Roca. Afortunadamente fueron leves y el pequeño que estuvo internado ya fue dado de alta, mientras que la niña de 4 años siempre fue paciente ambulatoria.

En ese contexto, la médica pediatra que los atendió, Julia Toledo del Centro Materno Infantil (CEMyN), no se cansó de señalar que con respecto a esta enfermedad que se presenta mayormente en los meses de calor, a partir de octubre y noviembre, lo fundamental es controlar la higiene en la manipulación y procesamiento de los alimentos, la calidad y procedencia de los mismos, evitar bañarse en aguas estancadas o natatorios sin habilitación y, sobre todo, consultar tempranamente al médico ante la presencia de diarrea en los pequeños.

Los síntomas comienzan con diarrea mucosa o mucosanguinolenta, vómitos, palidez intensa ya que afecta a los glóbulos rojos, fiebre, disminución del volumen de orina por la deshidratación o por la afectación del riñón.

Toledo señala que el SUH es una enfermedad endémica en Argentina, con una incidencia de 350 a 400 casos por año producida fundamentalmente por una bacteria intestinal, la Escherichia coli 0 157, que libera una toxina denominada verotoxina que se fija en las paredes del intestino gracias a unos receptores que están presentes en los niños (por eso los afecta más a ellos) y empiezan a destruir la membrana de los glóbulos rojos o la célula madre del riñón.

EL SUH afecta particularmente a niños de entre 6 y 30 meses aunque hay casos de niños de hasta 10 años que presentaron la enfermedad.

La gravedad del SUH es variable dependiendo a qué zona del organismo afecte.

Puede derivar en una presentación hemorrágica para lo que se va a necesitar transfusiones o puede afectar el riñón que deja de producir orina y requiere dializar.

En los peores casos, la insuficiencia renal deriva en la necesidad de un trasplante o algunos pacientes presentan síntomas neurológicos como derrames y convulsiones.

Luego de estar en contacto con la fuente del contagio la enfermedad presenta los primeros síntomas a las 48 horas.

Consulta temprana

Un examen de materia fecal demora entre 48 y 72 horas con lo que es fundamental consultar tempranamente al pediatra y no medicar la diarrea aún cuando haya infección porque el antibiótico mata la bacteria y produce una liberación acelerada de la toxina, empeorando el cuadro.

Según la pediatra, lo importante es tomar los recaudos antes mencionados no sólo para evitar esta enfermedad, sino muchas otras de igual transmisión como la diarrea, la Salmonella o la hepatitis A (ver infografía).

Que cada vez se detecten más SUH puede ser debido a que se conoce la enfermedad y se la diagnostica como tal.

Otras veces, indicó Toledo, pueden presentarse de manera leve y pasar como otra dolencia y recién cuando el paciente es adulto sufre, a través de una insuficiencia renal, las consecuencia de haberla padecido de pequeño.