NEUQUEN (AN).- "El chofer estaba ebrio pero podrían haberlo matado", confirmaron los taxistas, quienes anticiparon que pedirán una sanción para él por conducir alcoholizado. Pero aclararon que "este caso puntual no desvirtúa nuestro reclamo de seguridad a la Policía por los asaltos de los que somos víctimas".

Dijeron que las autoridades policiales investigan cómo el chofer se produjo el raspón en la cabeza, si fue producto de un balazo o de otra causa.

Ayer a la mañana los representantes de los distintos sectores de los taxistas mantuvieron la primera reunión con el director de Seguridad Ciudadana, Mario Rinzafri. Analizaron la marcha de los operativos y convinieron en realizar los días lunes un encuentro semanal para eventualmente ajustar acciones. Por lo pronto ya acordaron que las empresas del rubro estén intercomunicadas entre sí y a la vez con la policía ante una emergencia.

A nivel regional también se puso en marcha un dispositivo dirigido por el jefe de la Policía, Carlos Zalazar, quien se comprometió -según taxistas y choferes- a coordinar acciones con las fuerzas policiales de las localidades vecinas.

La delegación de taxistas está integrada por Enrique Cisterna (jefe de la regional Comahue), Darío Lucca (dirigente de los choferes), Felipe Quezada (nuevo presidente de la Asociación Propietarios de Taxis) y Jorge Osorio (prosecretario).

Esta comitiva fue la que entregó a la plana mayor de la Policía una nota con el detalle de los lugares más críticos en materia de seguridad.

Asegura que los choferes sufren entre ocho y nueve veces ataques al mes, y que la diferencia con la estadística policial -que reduce la cifra a cuatro mensuales- se debe a que "no se hacen todas las denuncias porque ello implica perder dos horas de tiempo dentro de una comisaría".

El actual plan preventivo de seguridad "es muy similar al que organizamos con (el ex jefe de la Policía provincial, Juan Carlos) Lezcano, en la anterior gestión" de Jorge Sobisch, que "dio muy buenos resultados", acotó Lucca.

El disparador de las medidas preventivas fue la movilización realizada el viernes por los taxistas al ministerio de Seguridad, ante la versión de un supuesto asalto a un chofer, quien dijo haber sido baleado y sufrió un raspón en el cuero cabelludo, y de un robo cometido contra un peón de taxi en Parque Industrial.

El del taxista que habría sido atacado a balazos en la ruta y que resultó estar ebrio "es un caso puntual; la Policía determinará si fue asaltado o no y en qué circunstancias. De nuestra parte aplicaremos sanciones y pediremos lo mismo al municipio. Pero también ese día otro taxista sufrió un tajo profundo en un dedo con una navaja por defenderse de sus atacantes. No tenemos que esperar que haya una víctima fatal para reclamar seguridad", insistieron entre Cisterna y Lucca.