El camión

El acto del lanzamiento de la Concertación en Neuquén sirvió de plataforma para un nuevo despegue de la candidatura a gobernador por la UCR del intendente Horacio Quiroga. La fiesta se vivió a lo grande. Hubo un grupo de chamamé que hizo cantar y bailar a la multitud, abundaron las remeras y gorras blancas con la leyenda "Pechi gobernador". Mucho cotillón: globos rojos y blancos, papel picado y hasta una pantalla gigante para seguir el discurso -extenso y por momentos tedioso- de Quiroga.

Los organizadores no descuidaron detalles para dejar a todos contentos. Hasta hubo un camión con una pluma de la dirección de semáforos que sostenía la pantalla. El móvil 199 del municipio estuvo a la vista de todos en el acto partidario que se realizó en el Parque Central. ¿Lo habrán alquilado?

Apoyos

El relanzamiento de Quiroga como candidato a gobernador tuvo apoyos de diverso color partidario. Estuvieron los gobernadores radicales de Mendoza, Julio Cobos; del Chaco, Roy Nikisch; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; junto al intendente de la capital de esa provincia; el presidente de la UCR de Catamarca, Gerardo Collantes; dirigentes del PJ neuquino, algunos alineados con el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, y con el senador Sergio Gallia; referentes y concejales del Frente y la Participación Neuquina, y hasta hubo un representante del partido originario mapuche, José Millaqueo.

Pero el apoyo más llamativo fue el de una anciana de 102 años que llegó a último momento, con una remera de Quiroga gobernador y se instaló cerca del escenario. El grupo que la acompañó la identificó como "la abuela Pinilla", que no se movió durante todo el acto y se transformó en una correligionaria más del centenario partido.

Confusión

Muy confundidos andaban los funcionarios de protocolo del municipio capitalino la tarde del sábado, cuando el intendente Horacio Quiroga recibió en la Sala de Situación a los radicales que vinieron al acto del Parque Central, entre ellos los gobernadores Cobos, Zamora y Nikisch. La primera gran duda fue identificar a Nikisch. Inicialmente lo confundieron y le dieron una ubicación en la mesa, pero luego se comprobó que no era él, pero ya estaba sentado obviamente en otro sitio. No fue un dato menor, porque al final en la foto apareció ocupando un lugar central la señora del intendente, Marlene Velázquez, y alguno de los gobernadores, al estar mal ubicados quedaron relegados. Que sea la anfitriona no quiere decir que deba constituirse en la protagonista. ¿Figureti?

Sesenta

De gira por el norte del país, muy lejos de su provincia, Jorge Sobisch se permite ser optimista. El domingo estuvo en Jujuy, donde aseguró en conferencia de prensa que "llevamos tres años recorriendo la Argentina, sin lugar a dudas hemos tenido un crecimiento muy importante, arrancamos con un crecimiento del 3%, hoy estamos superando el 60%". La frase fue extraída de la crónica que publicó el diario digital "Jujuy al día", donde también se consigna que Sobisch tenía previsto reunirse con "un grupo de jóvenes" para trasmitirles su propuesta, pero "el encuentro se frustró, debido aparentemente a la poca convocatoria de público en el lugar". ¿Y el 60%?

Base lunar

El proyecto de ley para otorgarle a la empresa estatal Patagonia Ferrocanal la concesión para ejecutar la obra del Ferrocarril Trasandino generó ayer un debate intenso en la Comisión de Asuntos Constitucionales. Los argumentos a favor y en contra fueron numerosos. El menemista-sobischista Horacio Rachid elogió la iniciativa y aseguró que con la concesión se da un paso adelante. Allí salió a cruzarlo Raúl Radonich, del Frente Grande. Dijo que Rachid sostiene que se trata de una concesión que "es una realidad y esto es tan real como que saliera un proyecto de ley para otorgar una concesión para una base en la luna". Rachid no contestó, pero algunos comentaron que quizá ya piensa en el traje de astronauta.

Las rubias

El legislador ultrasobischista Manuel Gschwind estaba urgido por tratar un proyecto de ley y no lograba reunir el quórum necesario para el plenario de las comisiones de Hacienda y de Desarrollo Humano, que preside la oficialista Alicia Gemma Castoldi.

Pero el apuro le jugó en contra y se confundió. "Llamala a Storioni por favor", le pidió justamente a Storioni, que lo miró desconcertada. "Bueno a Castoldi -aclaró Gschwind-. Si son iguales". Storioni se levantó de la silla molesta por la comparación. Gschwind intentó arreglar las cosas y remató: "Las dos son rubias".

La aclaración complicó aún más las cosas, pero Storioni se quedó en silencio, mientras el resto de los diputados no paraban de reír. ¿Se vienen las mellizas de oro?

Interventor

Parece que el diputado nacional por Chubut Roddy Ingram se va a especializar en intervenciones. Después de haber cumplido esa función en el Partido Justicialista de Neuquén casi un año, acaba de ser designado en el mismo rol en Santiago del Estero.

Acá la semana pasada no se acordaron muy bien de él sus compañeros, porque dijeron que no sólo no los dejó ni un sólo papel de su gestión, sino tampoco ni un mísero peso y tuvieron que hacer una "vaquita" para pagar la solicitada del llamado al Congreso Provincial.

Bueno, también les dijo antes de irse que no había dirigente del partido con las condiciones mínimas de para ser candidato a gobernador. Pero por eso nadie reaccionó. El que dice verdad no ofende, dice el viejo refrán.

Cesárea

La discusión por el Trasandino involucró a gran parte de los diputados que concurrieron a la reunión de comisión. El emepenista Mirco Suste fue uno de los más entusiastas defensores del proyecto oficial. Y en su afán por demostrar que se trata de un proyecto de desarrollo estratégico que requiere de un gran esfuerzo y paciencia, sostuvo que "esto es más largo de lo que dura un parto".

La diputada menemista Olga Saldías reaccionó con rapidez para corregirlo. "Más largo que un embarazo", acotó. Suste siguió y recalcó que avanzar con el proyecto "es más duro que el fórceps". "Bueno, en cualquier momento hace una cesárea", remató Saldías. (AN)