WASHINGTON (DPA) - Excitantes fiestas nocturnas, refinados menúes para paladares exquisitos y fines de semana de descanso en centros que ofrecen tratamientos de bienestar: los cuadrúpedos estadounidenses no necesariamente llevan una típica "vida de perros".
Cada vez más hoteles y complejos turísticos ofrecen a los animales satisfacciones, que en general estaban reservadas a sus amos.
En los "After Work Partys" (fiestas después del trabajo) en el hotel Holiday Inn en Alexandria, cerca de Washington, cada martes y jueves unos 50 perros se sumergen en la vida nocturna de fiestas de la ciudad. Ladridos colectivos y olfateos hacen que la atmósfera parezca relajadas entre los canes, pero también sus dueños aprovechan la ocasión para establecer contactos sociales.
"Soy nueva en la ciudad. Los After Work Partys son una buena oportunidad para conocer gente", se alegra Lillian Ching. Esta abogada trata de participar cuantas veces le sea posible con su Chow- Chow de dos años y medio en las reuniones semanales de perros.
Pero los animales no reciben la comida usual. Madeleine Mitchel de "Madeleine's Dogstore" se ocupa de mimar a los canes con pasteles de las más diversas variedades. Todas las exquisiteces caninas hechas a mano se presentan, según el gusto, con forma de murciélagos, patos o huesos, y en la época navideña con forma de muñecos de nieve o árboles de Navidad.
"La receta del pastel para perros de manteca de cacahuete era de mi abuela", señaló Mitchel. Sólo prescinde del azúcar en la elaboración, para proteger la
salud de los animales. También la vestimenta para las fiestas es algo que los dueños de los perros cuidan con esmero. Fervientes amigos de los animales en Estados Unidos están constantemente a la búsqueda de la presentación perfecta para sus canes.
"Ya sea chaquetas de jean de verano, impermeables para días lluviosos o collares para días de fiesta: con nuestra vestimenta hacemos que los cuadrúpedos tengan un aspecto adecuado para cada fiesta", dijo Madeleine Mitchel, quien además de los pasteles para perros también vende en su comercio su propia "Doggy-Couture".
En ocasiones especiales, los comercios de artículos para perros como el de Mitchel prácticamente son avasallados por los clientes, según indicó. "En Halloween y Navidad agotamos todas las existencias", señaló.
Para recuperarse de las fiestas nocturnas, los perros cuentan con el centro vacacional para animales "Olde Towne", en Springfield, estado norteamericano de Virginia. Allí pueden relajarse y dejarse mimar con diferentes sesiones de belleza.
"Los perros disfrutan de los masajes al igual que nosotros los seres humanos", afirma la administradora del hotel Birgit Burton.
El tratamiento de bienestar comienza para los canes con un servicio de limusina, que los retira para llevarlos hasta el hotel, donde las habitaciones están provistas con televisores y cámaras web, según el pedido de los dueños de los perros.
"Algunos amos les desean las 'buenas noches' a sus queridos seres amados por mensaje por video o determinan el programa de televisión para los animales", dijo Burton.
Para el cuidado del pelaje de los perros, el hotel utiliza champúes especiales, según el tipo de pelo y teniendo en cuenta si son alérgicos o no, explicó la administradora del hotel. En tanto, menos agradable es para los animales la manicura de sus patas. "A ningún perro le gusta", dijo la cuidadora de perros Anitra Piper, de 33 años. "En cambio les gusta mucho más ser bañados o hacer gimnasia acuática en la piscina".
La cuenta por supuesto queda a cargo de los amos, y no se diferencia mucho de los precios de hoteles para bípedos: una habitación común cuesta unos 56 dólares, mientras que una suite de lujo con televisión, cámara web y ventana puede superar los 90 dólares. Para los extras, los dueños de los canes deben sacar dinero adicional de la billetera: media hora de masajes y gimnasia acuática cuestan 35 dólares. Se puede gastar mucho dinero para la "vida de perros".