EL BOLSON (AEB).- El desmanejo del municipio en la recepción y distribución de al menos 700 metros cúbicos de leña del Plan Calor 2004, salió a la luz ayer en esta localidad en el marco de una causa por peculado que se le sigue a un empleado municipal y a un chofer que trabajó contratado por la comuna ese año.

El debate oral y público efectuado en el Juzgado de Paz tuvo por acusados a Bernabé Figueroa, que se desempeñaba en esa época como director de Espacios Verdes, y a Jorge Raúl Figueroa.

Al primero, que en función de su cargo tenía encomendada la vigilancia y cuidado de la leña adquirida por la comuna para el plan Calor 2004, se le atribuye haberse apoderado en forma ilegítima de aproximadamente 500 metros cúbicos de diferentes cortes de madera autóctona para luego comercializarlos a través de Jorge Raúl Figueroa.

Este último era el conductor del camión municipal que se utilizaba para retirar la madera de los lugares de desmonte en el predio de la cooperativa La Mosqueta y en las reservas provinciales de El Chucao y El Guadal.

Numerosos testigos desfilaron ante los jueces de la Cámara Segunda del Crimen constituida ayer en esta localidad por Héctor Leguizamón Pondal, Miguel Angel Lara y César Lanfranchi, luego que los acusados se negaron a declarar.

Primero lo hizo el funcionario municipal Jorge Torman, quien fue el autor de la denuncia, según dijo, siguiendo instrucciones del intendente Romera.

Los hechos investigados se habrían producido en el invierno de 2004 luego que denuncia anónimas y vecinos damnificados diesen cuenta de que Raúl Figueroa vendía leña del municipio a título particular, por valores muy inferiores a los de mercado en ese momento.

De acuerdo a lo dicho por Torman, Bernabé Figueroa tenía a su cargo la recepción de la leña, mientras que Acción Social se encargaba de la distribución.

Luego fue invitada a declarar Cristina Menéndez, quien se desempeñaba como titular de Acción Social en ese período y que continúa siendo funcionaria política de Romera.

El testimonio de Menéndez fue el más prolongado y de sus respuestas quedó en claro que no había controles efectivos para verificar que la leña otorgada por la provincia llegase en su totalidad al corralón de Espacios Verdes.

Tampoco que la distribución tuviese una sola boca de salida ya que se vio que además de la funcionaria, el intendente, Ariel Ayllapán y el acusado Bernabé Figueroa ordenaban o entregaban el combustible. Menéndez misma evalúo cierta "desprolijidad en el manejo del Plan Calor".

Que no se halla iniciado oportunamente un sumario administrativo fue explicado por la asesora legal del municipio, Gabriela Alvarez Lamas, en que en ese momento había un planteo de inconstitucionalidad sobre el Estatuto municipal. Dijo que por ello se optó por la denuncia penal.

Posteriormente varios testigos comprometieron a Raúl Figueroa, como el chofer del camión amarillo del municipio que al menos en tres oportunidades descargó leña en su domicilio de barrio Esperanza. Y hubo una mujer que admitió haberle comprado al hombre una camionada.