La Dirección General de Aduanas reclamó ayer penas de hasta 7 años y medio de prisión para los ex directivos de Casa Piana acusados en la causa conocida como la "mafia del oro", por la presunta comisión del delito de contrabando mediante la sobrefacturación de exportaciones.
En su rol de querellante, la Aduana exigió 7 años y medio de prisión para Enrique Piana, seis años y medio para Miguel Seligmann y cuatro años y medio para Martín Suárez Anzorena.
Además, reclamó que todos sean inhabilitados para ejercer el comercio por un período similar a los de la pena privativa de libertad.
Tras escuchar el alegato de la parte querellante, el Tribunal Oral en lo Penal Económico número uno dispuso un cuarto intermedio en el juicio, que se reanudará con la acusación del fiscal Jorge Pezzano Rava.
Durante su alegato, el abogado Jorge de la Merced reclamó también al tribunal que imponga tres años y seis meses de prisión al despachante de aduana Mario Grispun, al considerarlo "partícipe necesario" de ocho de los 372 casos que les atribuyó a los otros procesados.
La Aduana consideró "probados" los hechos ilícitos, al argumentar que la "confesión" de Piana, quien admitió que se enviaban metales al exterior (la mayoría de las exportaciones a los Estados Unidos) con una "sobrevaluación" que en algunos envíos "superaban el 800 por ciento".
"Casa Piana estaba cebada" y "hubo sobrefacturación que el propio Piana calculó en un 854 por ciento", indicó la parte querellante.
Además, estimo el perjuicio al Estado nacional en un monto "superior a los 30.000.000 de dólares", mediante operaciones que se habrían concretado entre 1993 y 1995. (Télam)