BUSCAR       RIO NEGRO    WEB     
TITULOS SECCIONES SUPLEMENTOS OPINION CLASIFICADOS SERVICIOS NUESTRO DIARIO PRODUCTOS
 
Sábado 25 de Noviembre de 2006
 
Edicion impresa pag. 31 > Policiales y Judiciales
El imputado fue condenado a 19 años de prisión
La víctima recibió golpes en distintas partes del cuerpo, fue maniatada y estrangulada. Ahora investigarán si también participó la pareja del joven acusado.
El acusado fue retirado de la sala en medio de insultos. Los familiares de la fallecida no ocultaron su dolor.
El acusado fue retirado de la sala en medio de insultos. Los familiares de la fallecida no ocultaron su dolor.
Click para ampliar

NEUQUEN (AN).- La Justicia condenó ayer a 19 años de prisión a José Esteban Aguilar, el joven que en octubre del año pasado asesinó a Cristian Rebolledo y ocultó su cadáver en la cisterna de una casa abandonada. Los familiares de la víctima recibieron el fallo con lágrimas de dolor y expresaron que les parecía poco el monto de la pena aplicada.

"El hecho reviste especial gravedad", dice la sentencia conocida ayer, y si bien se ignora el móvil, "se actuó con cierta premeditación y alevosía". La víctima fue golpeada y cuando estaba inconsciente o al menos aturdida, la ataron de pies y manos y ahorcaron con un cable.

Apenas terminó la lectura del fallo, Aguilar (30) fue retirado apresuradamente de la sala por un grupo de policías, mientras los familiares le gritaban "asesino".

Durante el juicio, el imputado se había declarado inocente. Pero con solidez, la Cámara integrada por José Andrada (autor del primer voto), Emilio Castro y Héctor Dedominichi rebatieron todos sus argumentos.

El cadáver de Rebolledo (27) fue hallado el 31 de octubre del 2005 en la cisterna ubicada en el jardín delantero de la vivienda de Roca 924, una zona de lujosas residencias. Esa casa estaba desocupada y Aguilar y su pareja eran moradores ilegales.

Rebolledo había sido visto por última vez el 16 de octubre a la madrugada. Las pericias establecieron que murió ahorcado con los cables ese mismo día, y que lo metieron en la cisterna ya sin vida.

El fallo recuerda que en el interior de la vivienda había manchas de sangre que, examen de ADN mediante, se comprobó que pertenecían a la víctima. También encontraron la billetera de Rebolledo. "En ese lugar y no otro le fue quitada la vida", señala.

En cuanto a la autoría de Aguilar, hay numerosas pruebas que lo comprometen. Por un lado, está probado por la declaración de numerosos testigos que residía en esa vivienda junto a su pareja; y por el otro, cuando lo detuvieron tenía puestos los zapatos de la víctima. Además, había ofrecido en venta el reloj y el cinturón de Rebolledo.

Aguilar dijo que había encontrado todas esas pertenencias "tiradas frente al cesto de la basura" de la vivienda, pero la Cámara lo consideró "un mal intento de justificar su tenencia".

Otro argumento del imputado fue que a esa vivienda entraba cualquiera, por lo que un desco

nocido pudo ser el criminal. Sin embargo, los jueces razonaron que si el autor hubiera sido alguien que no vivía allí, no se habría tomado la molestia -ni habría corrido el riesgo- de sacar el cadáver para esconderlo en la cisterna.

Respecto de la colaboración que pudo haber tenido Aguilar, la Cámara señaló que se determinará cuando se investigue a su pareja, que hasta ahora no está imputada en la causa. Por último, en la sentencia se dejó asentado que por la gravedad del hecho y del medio empleado para causar la muerte, correspondía aplicar una pena alta. Por eso le impusieron 19 años de prisión.

 
haga su comentario otros comentarios
 
 
sus comentarios
Diario Río Negro.
Provincias de Río Negro y Neuquén, Patagonia, Argentina. Es una publicación de Editorial Rio Negro SA.
Todos los derechos reservados Copyright 2006