CAVIAHUE (AZ).- Dos ciudadanos de nacionalidad austríaca fallecieron trágicamente el domingo al atardecer al precipitarse a tierra el motoplaneador biplaza con el que sobrevolaban una zona cercana a Caviahue.

El lugar del accidente, denominado Buta Mallín, es de muy difícil acceso lo que complicó la llegada de los equipos de Gendarmería, que ayer por la tarde tomaron contacto visual con la aeronave y hoy comenzarán con las pericias de rigor.

Los cuerpos de los infortunados pilotos, identificados como Helmut Bammer y Wolfgang Zarl, quedaron en el lugar del accidente con una custodia de las fuerzas de seguridad y serían trasladados a Zapala hoy si mejoran las condiciones climáticas y pueden operar los helicópteros.

De acuerdo a las versiones que circulaban ayer, no se les practicaría la autopsia ya que estaría claro que se trató de un episodio accidental.

El biplaza matrícula ACH 1 había partido del aeropuerto de Zapala el domingo por la tarde aparentemente sin autorización de Fuerza Aérea, pero esta versión no fue confirmada oficialmente. Otra hipótesis que indi

caba que en realidad habían iniciado el vuelo desde Bariloche, fue descarta de plano por los investigadores.

Lo cierto es que al llegar a la zona de Trolópe, en cercanías del Cajón de Hualcupén, la aeronave se desplomó por causas todavía no determinadas provocando la muerte en el acto de los dos ocupantes.

Las fuentes consultadas no revelaron si al momento del accidente el motoplaneador tenía encendido el impulsor o bien se mantenía por las corrientes de aire. El área donde se produjo la colisión es considerada de "alto riesgo", según La investigación oficial radicada en el juzgado Federal a cargo de Rubén Caro será fundamental para echar luz sobre el tema.

Ayer, una comitiva encabezada por el jefe del escuadrón de Gendarmería Nacional con asiento en Las Lajas, Ricardo Perichón, llevó adelante una serie de diligencias en la zona del accidente. En principio, se habían destinado dos helicópteros pero el fuerte viento y las condiciones climáticas adversas hicieron que las tareas de rastrillaje deban realizarse por vía terrestre.

"Todo indica que fue un lamentable accidente, no hay otros elementos que nos permitan suponer una hipótesis diferente",

sostuvo una fuente judicial con acceso al expediente. Además, agregó que se estaba evaluando la posibilidad de obviar la autopsia de los cuerpos en virtud de que no existían dudas con respecto a los motivos del fallecimiento. "Dejamos una custodia porque era imposible que el helicóptero pudiera operar debido a la intensidad del viento", dijo Perichón.

Trascendió que los pilotos, quienes tenían una importante experiencia en el manejo de este tipo de aeronaves, pertenecerían a la empresa Quo Vadis Internacional. La firma, de origen francés, había elegido a Zapala como centro de operaciones para realizar este tipo de vuelos durante tres meses.

Al parecer, las condiciones climáticas y las corrientes de aire en el centro de esta provincia son más favorables para el funcionamiento de estos motoplaneadores, ya que les permitirían efectuar maniobras de despegue y aterrizaje con mayor facilidad.