CIPOLLETTI (AC).- Un muerto de arma blanca y un detenido, fue el saldo de una pelea que ocurrió en la madrugada de ayer en una esquina de la zona norte de esta ciudad. La policía intenta determinar si participaron más personas en el hecho.

La víctima fatal fue identificada como Alejandro Bernales, de 35 años, domiciliado a escasos 70 metros de donde se encontró su cuerpo; mientras que el sospechoso detenido fue identificado por la policía como Marcelo Rosas. Este último estaría comprometido ya que "hay varios elementos que lo incriminan", dijo una fuente policial.

Si bien el cadáver fue trasladado a la morgue judicial para realizarle una autopsia y determinar fehacientemente las causas de la muerte, el deceso se habría producido por las heridas de arma blanca.

El hecho se descubrió cerca de las 3.15 cuando dos personas que circunstancialmente pasaban por el lugar alertaron a la comisaría 32 sobre la presencia de un hombre tirado en la calle. Al arribar a Venezuela casi La Esmeralda, el personal policial encontró el cuerpo de Bernales y constató que "ya no tenía signos de vida". Presentaba heridas de arma blanca en la zona del cuello y el tórax.

Poco después se hicieron presentes en el lugar la jueza María del Carmen García García, el médico forense y personal de Criminalística de la policía provincial.

De acuerdo a la información brindada por el subcomisario Roberto García, jefe de la unidad 32, minutos después se recibió otra llamada alertando que en el barrio La Paz estaba deambulando una persona con un cuchillo. Cuando el móvil policial llegó al lugar, el sospechoso tiró el arma e intentó darse a la fuga, informó.

Si bien todos los elementos están sujetos a pericias, García aseguró que el detenido presentaba signos de haber estado en una pelea mientras que el arma, un cuchillo de unos 20 o 25 centímetro de hoja firme, tendría manchas de sangre, al igual que la ropa.

Rosas habría tirado el cuchillo en el patio de la casa de su madre de la que tendría excluida la entrada por orden judicial. Según fuentes policiales, la misma progenitora habría solicitado la medida por amenazas de muerte proferidas por su hijo.

De acuerdo a las mismas fuentes, Bernales vivía con su madre y dos hermanos y "hacía changas". Creen que las dos personas -presuntamente en estado de ebriedad- tuvieron una pelea que terminó con la muerte de uno de ellos, aunque no se descarta que hubieran participado en el hecho más implicados.

Actualmente se están buscando testigos que puedan aportar datos sobre el homicidio y se están realizando todas las pericias necesarias para determinar fehacientemente si el arma secuestrada es la que se utilizó para ultimar a Bernales, y si las manchas de sangre halladas en la ropa se corresponden con la víctima.

Rosas quedó detenido en la comisaría 32, a disposición del Juzgado 21, a cargo de García García.