ZAPALA (AZ)- El corte de la ruta nacional 22 a la altura de Ramón Castro cumplió ayer una nueva jornada sin que trabajadores y funcionarios puedan sentarse a una mesa de diálogo. La delegación Zapala de la Subsecretaría de Trabajo notificó a las partes de una reunión para la semana próxima en un hecho que fue calificado como "vergonzoso" por la dirigencia gremial que encabeza el reclamo.
"Si la hubieran anunciado para el sábado automáticamente se levantaba el corte mientras dure la mesa de negociación, pero no les importa nada" dijo el secretario general de ATE Zapala, Ricardo Pérez.
Además, reveló que "la funcionaria encargada no contesta el teléfono y pareciera que no les interesa resolver este problema".
La situación ayer fue otra vez complicada para el tránsito. Los autos particulares, las camionetas y algunos vehículos de carga utilizaron el camino alternativo y pudieron seguir viaje.
Otros camiones, en tanto, prefirieron esperar el levantamiento para evitar cualquier problema en la picada.
"Tengo el camión cargado, si encaro y me quedo tirado pierdo más que esperando acá" explicó resignado uno de los choferes.
El piquete se levanta cada doce horas. A las 8 de la mañana y a las 20 los manifestantes permiten que pasen todos los vehículos y vuelven a cerrar la ruta con cubiertas.
En tanto, los comerciantes se reunieron nuevamente anoche en medio de fuertes críticas hacia las autoridades provinciales y locales por la falta de resolución del tema.
El presidente de la Cámara, Daniel Moreira volvió a reclamar "respuestas" del gobierno neuquino al tiempo que anticipó que podría generarse una catarata de presentaciones judiciales contra los responsables del prolongado conflicto.
Funcionarios de la primera línea del municipio reconocieron que el intendente de Zapala, Raúl Podestá, no había tenido éxito en sus gestiones ante las autoridades neuquinas para lograr un acuerdo.
El ministro Jefe de Gabinete, Jorge Lara, "ni siquiera le contesta el celular" sostuvo el secretario de Gobierno municipal, Alejandro Orlando. Agregó que "seguimos con mucha preocupación el caso que trae un perjuicio muy severo para la economía local".
Ayer también se alzaron voces desde la terminal de ómnibus donde la actividad se vio notoriamente resentida como consecuencia del bloqueo. La mayoría de los agencieros sufrió una drástica reducción de sus ingresos debido a la virtual paralización de los servicios de media y larga distancia.
En el ámbito judicial no hubo novedades después que el juez federal Osvaldo Mirás le exigiera tanto a Nación como a provincia que disponga los medios para desalojar la ruta.
El magistrado le reclamó en primera instancia al presidente de la Nación pero no encontró eco y el jueves le repitió el pedido a la ministra de Seguridad de Neuquén, Susana Arévalo.