Con su vocabulario brutal, Luis Barrionuevo definía ayer a la reunión de la CGT en apoyo a Hugo Moyano como un "mamarracho". "No lo apoyó nadie, hizo un rejunte, el 'Negro' está jodido", se entusiasmó en la intimidad. Como le dice a los suyos, en estos días no debe aparecer públicamente consejo de su esposa, Graciela Camaño, y de los "Gordos"-, porque sus típicas apariciones polémicas podrían arruinar su delicado plan para vencer a Moyano.
"Esto no es joda, acá estamos jugando por el poder de verdad", repite. "El poder", para Barrionuevo, es el control de la CGT, el órgano sindical fundamental para Kirchner en el 2007.
Como es su estilo, esta operación del gastronómico esconde múltiples objetivos. Si logra desbancar a Moyano, su triunfo será triple:
" Logrará el control de la CGT, vengando la "traición" de Moyano, a quien impulsó a la jefatura de la central obrera en un principio, hasta que éste tomó diálogo directo con Kirchner y le jugó en su contra. En estas idas y vueltas fue aliado y adversario de los "Gordos", según la ocasión.
" Presionará así al Gobierno, a quien en su momento le había pedido ayuda públicamente para la elección provincial en Catamarca, su provincia de origen, y la que sueña con gobernar. Su principal enemigo político allí es Armando "Bombón" Mercado, ex marido de Alicia Kirchner, quien dialoga muy seguido con su ex cuñado Néstor Kirchner. "Bombón" es el operador político del Presidente en esa provincia.
" A pesar de que busca el apoyo circunstancial del gobierno para las elecciones en Catamarca, Barrionuevo es un aliado incondicional de Eduardo Duhalde, quien desde hace semanas arma desde las sombras la oposición peronista a Kirchner. El bonaerense delegó el armado de la estructura del PJ opositor en el misionero Ramón Puerta, quien se entusiasmó aún más con el proyecto luego de la derrota electoral del oficialismo en Misiones.
Barrionuevo es la pata sindical en esta operación de "esmerilamiento" constante a Kirchner. Estos dirigentes esperan con ansias que caiga el poder de Moyano de la CGT. Sería un duro golpe para Kirchner. "El pingüino sostiene al 'Negro' (por Moyano), porque sabe que si asumimos nosotros se le pudre", se relame ante los suyos Barrionuevo.
Dentro de este esquema, Andrés Rodríguez, de la UPCN, funciona como nexo con el Gobierno ya que mantiene un diálogo con Alberto Fernández, jefe de Gabinete. Lleva y trae noticias de un lado y del otro. Los "Gordos" quieren ya la cabeza de Moyano, pero son cuidadosos. Por estas horas los carcome un dilema: si les conviene o no tensar la situación al máximo yéndose ellos de la CGT. La movida tendría un enorme impacto ya que se trataría de hecho en una ruptura de la CGT. "Le dejamos la CGT vacía al 'Negro'", dicen.
NICOLAS WIÑAZKI