Tommy Robredo se clasificó para las semifinales del MS de París, al derrotar a Jarkko Nieminen, y el que se llevó la peor parte fue Mario Ancic, quien se despidió del
Master de Shanghai.
El español, ya con el pase al torneo de maestros, venció al finlandés por un reñido 6-7 (4-7), 7-6 (7-4) y 6-4. Así, quedó a un partido de la final y de la posibilidad de conquistar el último Masters Series de la temporada. Si lo logra, se sumaría al que logró este año en Hamburgo, donde, al igual que en París, no estaban Roger Federer y Rafael Nadal.
Robredo se medirá con Nikolai Davydenko, quien frustró las esperanzas que aún tenía el croata Ancic de ganar un puesto en el Masters, que reunirá a los ocho mejores desde el 12 de noviembre. El ruso, ya clasificado, se impuso por un doble 6-3.
Este resultado deja en una sólida posición a James Blake -le dio una mano a David Nalbandian- para ocupar la última vacante. Lo único que podría impedírselo sería que el alemán Tommy Haas gané París y se adjudicara la plaza.