ROCA (AR).- Con un importante número de participantes se desarrolló ayer el Foro Tierra Urbana y Vivienda, brindando un marco ideal para conmemorar los 20 años de trabajo de "Un techo para mi hermano".

La actividad, que se desarrolló durante todo el día en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales en Roca, contó con la asistencia de más de 80 personas entre representantes de numerosas instituciones gubernamentales así como organizaciones intermedias y no gubernamentales vinculadas con la construcción del hábitat de los sectores marginados por el sistema económico.

El encuentro, organizado por la Asociación Civil "Un techo para mi hermano" en el marco de su vigésimo aniversario, tuvo como objetivo "no buscar grandes conclusiones sino propiciar el intercambio de quienes están vinculados con la construcción del hábitat popular (...) y generar espacios donde compartir experiencias y fortalecer las propias", señaló Adriana Hipperdinger, miembro de "Un techo...".

Con la seguridad de que "una casa es más que una simple fachada", la asociación nació hace 20 años en Choele Choel, primero como una Comisión Pro-vivienda en la parroquia del Padre Claudio y hasta que el obispo de Viedma, Miguel Hesayne, pro

puso transformarlo en el Programa Diocesano "Un techo para mi hermano".

En 1999 se convirtió en una asociación civil dedicada a la construcción del hábitat, promoción y desarrollo de comunidades marginadas.

Según palabras de su presidenta, Inés Pérez, "la edificación de una vivienda es una excusa para llegar a la gente. La meta es lograr una integración real y revertir la exclusión inicial", sostuvo.

Es por eso que "Un techo para mi hermano" cada vez más fue incorporando "capacitación" no sólo en lo que hace a la construcción de la vivienda sino también en aspectos relacionados con el fortalecimiento de los grupos con los que trabajan.

"Nunca estuvo la cuestión de la caridad sino de la promoción y ahora de los derechos, de los famosos DESC (Derecho Económicos, Sociales y Culturales)" explicó Hipperdinger.

Los técnicos de la ong

La asociación actualmente cuenta con alrededor de 25 técnicos que trabajan para la organización, ligados a los proyectos en concreto.

Debido a las distancias y para darle mayor participación y repartir responsabilidades, la asociación se dividió en tres regiones: ellas son, la Atlántica -Valle Medio, Alto Valle y Andina-Línea Sur aunque mantiene su sede en General Roca.

En sus 20 años de historia han posibilitado que cientos de personas construyan más de 600 viviendas y mejoramientos habitacionales. Esto, además de contribuir, a través de propiciar una experiencia democrática auténtica, a la conformación de ciudadanos responsables y solidarios, se destacó desde esta prestigiosa ong regional.