ROCA (AR).- Diez años de vida cumple la cooperativa de trabajo que sostiene al jardín maternal y de infantes "Mi pequeño mundo", aunque como institución educativa deban agregarle 23 años más junto a la comunidad local.

El grupo cooperativo que hace funcionar la institución es una de las primeras cooperativas educativas de Roca y se conformó cuando la Mutual Bancaria, que en ese entonces era dueña del jardín, le propuso a un grupo de ocho empleadas que se constituyeran como cooperativa y en lugar de darles la indemnización les dieron todo el mobiliario para que se hicieran cargo del lugar.

Para Silvia Canale, actual presidenta de la cooperativa, fueron los años más difíciles que vivieron porque no sólo debieron aprender todo lo relacionado al cooperativismo sino sostenerse sólo con el ingreso que recibían de la matrícula de algo más de cuarenta chicos.

A diferencia de otras cooperativas educativas, en "Mi pequeño Mundo" sólo son socios los empleados y se sostienen íntegramente gracias a la cuota de los padres y de algunas actividades que organizan como venta de rifas o alquiler del lugar para cumpleaños.

Este año incorporaron sala de 5, con el reconocimiento de CPE, por lo que la cooperativa recibe actualmente 140 niños desde los 45 días hasta los 5 años y en un horario por demás elástico ya que abren a las 6.30 y cierran a las 20.30.

Aunque el corazón es por demás grande, el espacio está utilizado al máximo así que el nuevo desafío es tramitar un subsidio o préstamo para ampliar el sector maternal pues, según manifestó Silvia, "apenas es octubre y ya están viniendo madres embarazadas a reservar un lugar para su futuro hijo".

Silvia, quien trabaja en el jardín desde la época que era "El Principito" -y por lo tanto conoce de otras formas de organización-, explicó que la cooperativa hizo del jardín "una gran familia" en la cual impera la solidaridad, el compañerismo, la camaradería y en muchos casos la amistad.

Y es justamente eso lo que, sin abandonar el aspecto educativo o pedagógico, tratan de transmitir a los más chiquitos en todo momento.

Aunque no van a hacer grandes festejos, para noviembre tienen pensado realizar alguna reunión con aquellos que fueron socios de la cooperativa y, a lo mejor, un pequeño brindis con los padres.