BUENOS AIRES (Télam).- La cineasta Susana Neri recorrió la Argentina para entrevistar a mujeres jóvenes sobre lo que saben y quieren en materia de educación sexual y con ese testimonio inédito elaboró un documental "para abrir el debate y generar conciencia cívica" sobre derechos sexuales y reproductivos.

La película, denominada 'El toro por las Astas' retrata mujeres vulnerables, del norte y del sur del país, con historias de pobreza y violencia y pocos recursos para decidir cuándo y con quién tener un hijo.

Cordobesa, fotógrafa, cineasta egresada de la Escuela Nacional de Experimentación y Realización cinematográfica, dependiente del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), Neri comenzó la investigación de su ópera prima tras el embarazo adolescente de Andrea, una sobrina que vive en su provincia natal, puntapié inicial del filme.

En una suerte de recorrido hasta llegar a la casa familiar, la cineasta entrevistó a otras adolescentes de la misma edad que Andrea, entre las que hay mujeres pobres, militantes de los derechos humanos, funcionarios y al ministro de Salud, quien afirma que en Argentina, se practican 500.000 abortos por año.

Presentada la semana pasada en el Festival de Cine y Derechos Humanos y con una función programada para el próximo jueves, en Guido 1952, la película ya fue vista por 2.000 espectadores durante cuatro meses de proyección itinerante en bibliotecas, universidades, centros barriales y de salud y en salas alternativas de todo el país.

"Hay que saber para poder decidir"

- En el documental hablan mujeres muy vulnerables que son golpeadas por sus parejas o no sabían, por ejemplo, que después de una primera menstruación podían quedar embarazadas. ¿Esperabas encontrarte con esta realidad?

- No, creo que una vive envuelta en un mundo personal. Yo no tuve hijos hasta ahora, por diferentes motivos no pude llevar ese proyecto adelante, y siempre pensé en que la mujer debe decidir sobre su cuerpo. ¿Cómo puede ser que a pesar de todos los avances tecnológicos y los derechos logrados, una piba no pueda pedir en una relación sexual el uso del preservativo?

Hablar con esas mujeres fue lo más fuerte que me pasó, como persona y como documentalista.

- Son mujeres que no tienen elección.

- No todas podemos acceder a estas herramientas; ni todas ni todos. Tomás De Aquino decía que para poder decidir hay que saber y en ese saber, se juegan muchas cosas. Saber también es acceder.

Las políticas neoliberales tremendas que hemos tenido, el silencio, resabio de la época de los '70, y cierta hipocresía social profunda, en la que tiene fuerte responsabilidad la iglesia católica, también condiciona el poder elegir.

- El documental sugiere algunos cuestionamientos a la iglesia católica, pero no la enfrenta en forma explícita.

- Fue una decisión personal. En la película queda muy claro cuál es mi postura sin necesidad de discutir con la iglesia porque además, no toda la iglesia piensa igual. Creo que la espiritualidad y la cama de la gente, son temas privados: que vos decidas ponerte un Dispositivo Intrauterino (DIU), nada tiene que ver con que creas en una doctrina determinada. La clase media se hace la religiosa, comulga y al DIU se lo pone igual y al forro lo usa igual y la que sufre la orden de los curas que se suben al púlpito y creen que tienen derecho a decidir por vos, son las clases más pobres.

- Todas las proyecciones concluyen con un debate posterior, ¿qué pasa en esa instancia?

- Es la única condición que pongo para proyectar el filme. Es un encuentro con la gente que produce fuerte empatía con las mujeres porque muchas veces, son situaciones que les pasaron o vivieron muy de cerca. Si después de la proyección se pudieran conformar talleres donde se cuestione por qué pasa lo que vieron y se trabaje la conciencia ciudadana, la película tiene sentido, sino será una película más para el que la pueda ver.