CORDOBA (Enviado especial, DyN)- La Unión Industrial Argentina (UIA) logró, después de un largo tiempo, una señal del gobierno en favor de uno de los reclamos más sentidos del sector empresario: la Ley de Riesgos del Trabajo.

Durante la 12da Conferencia Industrial Argentina que tuvo lugar en el Hotel Sheraton de Córdoba, los industriales lograron arrancarle al ministro de Trabajo, Carlos Tomada, la promesa de que la Ley que se está por mandar al Congreso no va a ser aprobada sin que tenga el visto bueno de la entidad.

Hoy, con Moyano golpeado por los hechos de San Vicente, el tiempo político para la ley de Riesgos de Trabajo puede estar mejor para los empresarios. El futuro de esa reglamentación se torna vital para las inversiones y el empleo.

El fallo de la Corte Suprema que declaró inconstitucional el artículo que prohibía a los trabajadores accidentados recurrir a la Justicia para hacer valer sus derechos indemnizatorios tornó inasegurable el riesgo laboral y así el costo incalculable.

Hoy los industriales quieren tener claro cuánto van a tener que pagar a sus empleados en caso de un accidente, dato que es una verdadera alquimia.

El problema que tenían hasta esta semana era que la base para discutir una nueva legislación era la que había propuesto el diputado cegetista Héctor Recalde de obvia inclinación en favor del empleado.

Tuvieron que abandonar la idea de volver al viejo régimen de ART que contemplaba indemnizaciones de miseria y en cómodas cuotas. Y aceptar que las ventajas que obtuvieron durante los 90 no las van a tener más. Hoy al menos admiten que el trabajador tiene derecho a pleitear ante un juez en caso de no aceptar el seguro de la ART. Solo piden que los empleados no cobren por "doble vía".

"Lo importante es que Tomada promete mandar al Congreso un proyecto del Poder Ejecutivo, y no el de la CGT", comentó a DyN, Horacio Martínez, titular de la cámara de Astilleros y el directivo de la entidad que más cerca está de las negociaciones laborales. El jueves pasado, el ministro de Trabajo no tuvo otra opción que aplaudir al abogado

Daniel Funes de Rioja ante una exposición sin fisuras de más de 30 minutos sobre los puntos que más le molestan a los empresarios de la política laboral del presidente Néstor Kirchner.