CENTENARIO (ACE).- Dos familias que aseguraron haber sido víctimas de una maniobra usuraria que pretende quedarse con sus viviendas, dicen que resistirán el remate; y mientras pelean la anulación del proceso en la Justicia, en la localidad hay una intensa movilización de vecinos e instituciones para respaldar la defensa de la casa propia.

María Palma y María Adelina Olivera eran las dueñas de lo que fue la farmacia Centenario.

Las mujeres tenían deudas con el Banco Provincia Neuquén, y para saldarlas de una vez, solicitaron un préstamo a la consultora Belleville en 1997 de 50.000 pesos para cancelar todas sus deudas con el banco provincial.

La consultora le entregó el dinero directamente en la gerencia del BPN en la casa matriz; en tanto para darles el préstamo como garantía escrituró -a costo de las mujeres- la farmacia a nombre de la consultora, aseguraron.

En el 2001 cuando ya habían cancelado unas 16.000 pesos del préstamo, llegó el corralito y los problemas financieros; perdieron el local y la consultora les envió a remate la farmacia.

Las mujeres aseguraron que

los nuevos compradores de la farmacia fueron personas allegadas a la consultora.

"Pensamos que con el importe del remate se había cubierto toda la deuda y nos desentendimos porque dejamos todo en manos de nuestro abogado. Eso fue hace cinco años, y ahora en febrero, llegaron los avisos de embargos ", dijo María Palma.

Palma vive de trabajo en casas de familia desde que cerró la farmacia y su casa es el único bien que posee. La vivienda fue rematada la semana pasada por orden del juez Javier Hernán Ghisini, pero la mujer interpuso en la Justicia la nulidad del acto porque aseguraron que la casa fue rematada en condiciones irregulares.

Mientras esperan que en la justicia prospere la anulación del remate, en Centenario las mujeres de la iglesia -que lograron el acompañamiento del cura Rubén Capitanio- iniciaron una campaña de junta de firmas para "defender" a las mujeres de la enajenación del bien.

La junta de firmas incluyó a la cooperativa telefónica, cartas al Deliberante y todas las organizaciones vivas en actividad.

Según se explicó, el rematador fue el martillero Sergio Andrés Sainz, quien "no leyó el edicto de remate antes de iniciar la puja; y cuando se la otorgó a la empleada de la consultora -quien resultó la compradora del bien en remate- lo hizo por señas de ojos; cuando en un remate debe conocerse a viva voz quién es el oferente y cuánta es la oferta", dijo Nélida Torres, ex concejal del PJ por Neuquén capital.

Torres explicó que hay al menos unas 60 personas damnificadas por el mismo accionar de la consultora Belleville, entre ellos sus familiares.

Detalló que por la presunta estafa por parte de esta consultora se inició una investigación fiscal en la que se presentaron unos 60 damnificados, que daban cuenta de la misma modalidad de préstamos con intereses que iban desde el 60 a al 120%.