CORDOBA.- Cerca de trescientos internos de un pabellón del complejo carcelario de la localidad cordobesa de Bouwer continuaban ayer en huelga de hambre para exigir la conmutación de penas a través de la aplicación del denominado "dos por uno", informaron autoridades provinciales.

Fuentes del Servicio Penitenciario de Córdoba (SPC) señalaron a Télam que "no hubo" modificaciones y que los internos continuaban con la protesta.

Según lo informado por el titular del SPC, Sergio Barrera, se trata de 297 internos alojados en el pabellón MD1 de la cárcel de máxima seguridad ubicada en esa pequeña población perteneciente al Gran Córdoba, los que desde el jueves "no reciben alimentos provistos por el Estado y sólo ingieren agua".

Pese a las quejas expuestas ante la prensa por familiares de los reclusos, el funcionario descartó la existencia de malos tratos.

Por otra parte, explicó que "la medida es pacífica, no es en contra del Servicio Penitenciario, pues exigen la derogación de la Ley Blumberg, volver a la ley anterior y agilización en las causas procesales".

También las internas

El funcionario agregó que a la medida de protesta se sumaron ayer 17 internas que corresponden al nivel de reincidentes de la cárcel para mujeres.

Las presas, a través de un acta, exteriorizaron su adhesión a la actitud asumida por los internos de Bouwer y reclamaron que se reforme el Código Procesal Penal, se informó.

La cantidad de participantes de esta huelga de hambre se redujo el viernes por la noche cuando, asesorados por sus familiares a través de abogados, unos cincuenta internos que podrían estar próximos a recuperar su libertad en caso de aplicarse efectivamente el "dos por uno", decidieron deponer su actitud para no complicar su situación. (Télam)