BUENOS AIRES, (Télam).- La vida del canciller alemán Willy Brandt es el eje de la obra "Democracia", del dramaturgo inglés Michael Frayn, que protagonizada por Rodolfo Bebán y con la dirección de Hugo Urquijo se estrenó en el Teatro San Martín.

"El personaje es entrañable desde todo punto de vista -declaró el actor a Télam -por lo que proponía en una época en la que llamar hermanos a los de Alemania Oriental era una mala palabra. Fue el ideólogo de la caída del Muro de Berlín y el que pidió y luchó por la unificación de Alemania".

Por otra parte, fue uno de los factores que permitió la reconciliación de Alemania con sus países vecinos en años de fuerte virulencia política.

"Es querible desde el punto humano porque es un hombre con muchas virtudes y muchas debilidades: era ciclotímico, bebedor social y mujeriego como pocos. Tenía todas esas debilidades que yo comprendo muy bien -confesó con ironía Bebán-, y eso lo hace un personaje muy querible y muy fácil de abordar. Inclusive porque sus discursos no son políticos, tienen un fuerte contenido humanista".

A partir de la obra "Copenhague", el éxito dirigido por Carlos Gandolfo en el San Martín, Frayn fue valorado por el público porteño como uno de los más interesantes dramaturgos contemporáneos, tanto por la temática como por la estructura de sus piezas.

En "Democracia" ratifica la excelencia de su dramaturgia e imprime un sentido casi cinematográfico. "Es notable la dinámica de la obra así como los códigos que tira, tan extraños y tan fáciles de abordar al mismo tiempo", destacó el actor.

Con un particular tratamiento del tiempo y el espacio con escenas que saltan de un lugar a otro y con idas y venidas en el tiempo en espacios de 10 ó 15 años, la acción se inicia con la asunción de Brandt en 1969 y termina con la caída del Muro de Berlín en el '89.

"No es nada convencional porque trabaja con muy pocos elementos y nosotros mismos armamos los escenarios, lo cual resulta muy seductor para el espectador", señaló Bebán.

Es de suponer que cuando un actor debe asumir el rol de un personaje real, mundialmente conocido, puede plantearse la posibilidad o no de emular sus características físicas o vocales. Sin embargo, no parece ser ese un problema para Bebán.

"Es más difícil abordar personajes de los que la gente tiene ideas prefijadas como Hamlet o Juan Moreira -declaró-, porque los ha idealizado. Además hay una diferencia notoria entre lo que era Willy Brandt físicamente y lo que soy yo. Hay unos cuantos kilos de diferencia cuando estaba en el gobierno, pero después fue un anciano muy delgado, espléndido, mejor que de joven".

En el camino de la elaboración del personaje fue de especial utilidad para el actor un video documental que presenta a Brandt desde que era muy niño hasta su muerte.

"Fue una gran ayuda para descubrir al hombre -aseguró el actor-. Herbert Frank era su verdadero nombre, pero cuando huye a Noruega en los años '30 adopta el nombre de Willy Brandt, pero tuvo además otros nombres y a veces volvía a Alemania camuflado de noruego".

"Todo esto ocurría cuando solo tenía 19 años -enfatizó Bebán-, él se despoja de su personalidad. En una oportunidad comentó: 'Muchas veces intento encontrar en mí al muchacho que fui en otra época'. Es conmovedor".

Y agregó otra declaración del estadista a este respecto: "Eso es lo más extraño, que él fuera yo y que yo fuera él; pero ya ni siquiera puedo recordar cómo era ser él, trato pero es inútil, esa época fue devorada por el tiempo. A veces me parece que lo veo en la multitud que espera".

Con evidente entusiasmo el actor recuerda algunas de las actitudes de Brandt que lo impactaron fuertemente.

"En una oportunidad va a Varsovia y lleva preparado lo que va a decir ante el monumento a los judíos caídos, pero cuando llega al lugar no dice nada sólo se arrodilla. Lo vemos y uno se da cuenta que es Alemania la que se arrodilla y no él, es impresionante, no dice nada, es un discurso mudo".

Finalmente, Bebán resumió su concepto sobre el canciller alemán: "No es un político, es mucho más. Yo lo catalogaría como un romántico estadista y por eso le dan a él el premio Nobel de la Paz en 1971".

Cabe recordar que Brandt deja el cargo en 1974 por no querer perjudicar a su familia, ante un affaire con fotos pornográficas, promovido por Günter Guillaume. Quince años después, el 9 de noviembre del '89, lo van a buscar porque cae el Muro de Berlín, algo por lo que él tanto había bregado: la unificación. Pero se declara definitivamente retirado de la política. El elenco se completa con los nombres de Alberto Segado, Horacio Peña, José María López y Toni Lestingi, entre otros.

Las funciones de "Democracia" se ofrecerán de miércoles a domingos a las 20:30.