NEUQUEN (AN).- A tan sólo diez minutos de haber comenzado concluyó la audiencia entre el intendente Horacio Quiroga y los familiares de Raúl Pili.
Los hijos y la mujer del mecánico fallecido se retiraron llorando, tras acusar al mandatario municipal de actuar "con soberbia". Luego resolvieron volver a ocupar el terreno en donde se erigía el taller que fue demolido por los operarios de la comuna.
Al mediodía, los hijos de Pili cercaron el predio ubicado sobre la traza de la calle Malazán. Según informó la agencia Neuquén del diario Río Negro, uno de los hijos del mecánico, Jorge Pili explicó que la intención es volver a construir el taller que demolieron "por una cuestión laboral y también sentimental".
El joven solicitó una entrevista con el gobernador Jorge Sobisch, para pedirle que la policía no intervenga en caso de que se produzca una nueva orden de desalojo. "Tenemos miedo de que las cosas pasen a mayores, pero no estamos dispuestos a dar el brazo a torcer", aclaró Lorena Pili, otra de las hijas.
De la audiencia que se realizó en el municipio participaron Quiroga; el subsecretario de Vivienda y Tierras Fiscales, Carlos Di Camillo; y el secretario de Gobierno, Guillermo Carnelli.