El Banco Mundial anunció ayer que "está estudiando'' el financiamiento solamente para una planta de celulosa en Uruguay y ha dejado el caso de la segunda a una nueva evaluación, debido a que la empresa decidió recientemente reubicar su proyecto en otro lugar.

El anuncio fue hecho a través de la Corporación Financiera Internacional (IFC) y la Agencia Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA) y menciona como beneficiaria a la planta Orion, de Oy-Metsa Botnia, de Finlandia, por un monto de hasta 170 millones de dólares.

Las dos agencias informaron que el caso de la planta Celulosa de M'Bopicuá, del grupo Ence, de España, ha quedado a la espera de nuevas recomendaciones debido a que los inversionista anunciaron su reubicación ante las dificultades que surgieron entre Uruguay y Argentina para su desarrollo.

IFC, el brazo del sector privado del Banco Mundial, dijo que "está estudiando la posibilidad'' de dar un préstamo de 170 millones de dólares al proyecto Orion.

Además, MIGA "está estudiando la posibilidad de brindar un seguro de riesgo político'' para el mismo proyecto. Pero, dijo que después del anuncio de Ence de reubicar su planta, IFC ha decidido "poner en espera el proyecto'' en tanto prepara una evaluación en su nueva ubicación.

El Banco Mundial dijo que su decisión de seguir adelante en su apoyo financiero se basa "en un extenso proceso de debida diligencia que incluyó los resultados concluyentes y positivos de un estudio de impacto acumulativo" y un informe complementario de peritos.

Los proyectos en estudio

Los resultados y el informe fueron difundidos la semana pasada. Los proyectos están ubicados en el departamento de Fray Bentos, en la ribera uruguaya del río Uruguay, y requieren una inversión de 1.860 millones de dólares, de los cuales el Banco Mundial potencialmente financiaría hasta 400 millones. Argentina ha alegado que sus efectos ambientales serían desastrosos en la ecología de la frontera y afectarían la actividad turística de la provincia de Entre Ríos.