El superávit de la balanza comercial registrado entre enero y julio fue el determinante para que el Banco Central pudiera recomponer sus reservas monetarias, y así recuperar los 9.000 millones de dólares con los que se canceló la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

De acuerdo a un informe realizado por el Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), el superávit de la balanza comercial de los primeros siete meses del año llegó a los 6.900 millones de dólares, lo que representó 6,5 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI) en términos anuales.

En este resultado fue determinante el desempeño de las exportaciones, que aumentaron 13 por ciento, impulsadas fundamentalmente por el incremento en los precios; ya que, medidas en volumen físico, se incrementaron apenas 4 por ciento.

Así, el superávit de la balanza comercial fue uno de las causales que explicaron el excedente de oferta en el mercado de cambios.

Esto permitió al Banco Central adquirir algo más de 9.000 millones de dólares, y recomponer casi totalmente el nivel de reservas internacionales existente el 31 de diciembre del año pasado, sin que el tipo de cambio sufriera variaciones y se mantuviera en los 3,12 pesos por dólar.

Como contrapartida, el informe del IAEF indicó que la base monetaria y el stock de pases y las Letras (LEBAC) y Notas (NOBAC) del Banco Central crecieron, en conjunto, alrededor de 21.000 millones de pesos entre enero y julio de este año.

También destacó el moderado cambio que se observa en el perfil de crecimiento de la economía en la primera mitad del año, en el cual el sector de la construcción cumplió un rol de locomotora, creciendo 21,2 por ciento en relación al primer semestre del 2005. (DyN)