SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El concejal de Encuentro de los Rionegrinos Andrés Martínez Infante, presentará ante el Concejo la semana próxima un proyecto para que se restrinja la actividad del casino local a las horas de la noche y la madrugada.

El propósito es evitar que se estimule la adicción al juego, en particular entre la gente de menores recursos, ya que se ha constatado que por esa causa se verifican serios problemas de jóvenes en riesgo y violencia familiar.

Con argumentos similares, el pasado domingo triunfó con amplitud la negativa a la instalación de un casino en Villa la Angostura.

En la actualidad, el casino (tanto en su sede central como en el anexo que se encuentra en el denominado Shopping Patagonia) abre su puertas a las 22 y cierra a las 5 de la mañana. "Desde temprano puede verse a gente humilde que gasta sus pocos recursos en el juego", dijo el edil. En ese sentido respaldó su iniciativa en un oficio que le cursó hace una semana el Juzgado de Familia, suscripto por las juezas del fuero Marcela Trillini y María Marcela Pájaro.

En esa nota se indica que los magistrados han advertido que en diversas causas de violencia familiar y niños y adolescentes en riesgo, "existe una cierta incidencia de cuestiones referidas al juego en los casinos locales".

Agrega que "la ludopatía exhibida por algunas personas ha dado lugar tanto a episodios de violencia entre parejas, como al descuido y negligencia en relación con el cuidado de los hijos".

En el pedido al CD para que esta problemática sea abordada, los jueces sostienen que "en algunas localidades se han impuesto limitaciones horarias a los fines de evitar el agravamiento de la adicción que genera la oferta de espacios disponibles y accesibles para ello".

Pero la iniciativa no es tan llana como podría suponerse. Martínez Infante pidió informes a la Legislatura provincial para que le aclare si una medida como la que se dispone a presentar está dentro de la órbita municipal o corresponde a la esfera de las regulaciones provinciales. "No queremos que luego se la tache de inconstitucional", señaló.

Lo cierto es que si la decisión pertenece a la provincia, en lugar de un proyecto de regulación de horario, presentará uno de comunicación para que la Legislatura derogue las disposiciones prohibitivas que puedan existir.

Martínez Infante aseguró que hace dos meses que está trabajando con este problema con el apoyo de grupos de ayuda a jugadores compulsivos y llamó la atención sobre el contrasentido que significa que la operación de los casinos genere ingresos por tasas municipales y un porcentaje de la recaudación vaya a la provincia. "Está establecido que esos fondos deben aplicarse a propósitos sociales, mientras tanto los más vulnerables pierden todo en las salas de juego".