VIEDMA (AV)- Un grupo de vecinos autoconvocados del residencial barrio Don Bosco de esta capital denunció una irregular interpretación del Código Urbanístico que a su entender está destruyendo la armonía urbanística al permitir la comuna construcciones que no se ajustan a la características que posee este sector de la ciudad.
Expresaron sus quejas porque hace casi un año que están esperando ser escuchado por la Comisión Municipal que atiende este tipo de situaciones en el Concejo Deliberante.
Según vienen observando que con las nuevas construcciones "surgió la avidez comercial que trajo aparejado la construcción de conventillos modernos que para disimular esa condición que ahora se las denomina 'condominios'".
Pusieron como ejemplo que existen algunos terrenos en los que no se admite más de dos viviendas pero se construyen cuatro, seis y hasta ocho de los denominados "duplex".
Consideraron que este tipo de construcción "atenta contra la calidad de vida de los que ya estaban (en el barrio), y de los que pasarán a ocupar esas nuevas unidades habitacionales".
Los vecinos también advirtieron que el aumento de la cantidad de habitantes "trae aparejado un movimiento más intenso, mayor circulación de vehículos y proveedores". Todo esto -agregaron- "sin contar que algunas de las nuevas edificaciones levantadas en el linde de viviendas ya establecidas, provocaron que éstas hayan perdido hasta el sol que generosamente las iluminaba como sus espacios libres", describieron.
En la presentación, los vecinos se preguntan el motivo por el cual no interviene en este tipo de situaciones el Colegio de Arquitectos de Viedma.
El barrio Don Bosco de la capital provincial comenzó a crecer en uno de los lugares más bellos de la ciudad, en cercanías de la ribera Este del río Negro, a partir de un loteo masivo que impulsó la obra salesiana de Don Bosco a partir de la década del '80.