SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Luego de varias promesas incumplidas, el intendente Alberto Icare inauguró ayer el segundo Tribunal de Faltas municipal, que quedó a cargo de la abogada Camila Banfi Saavedra y se ocupará únicamente de tramitar actas de infracción en materia de tránsito y transporte.

Lo que debía ser un acto sencillo y formal se convirtió en un agrio momento para el intendente, que fue increpado por varios contribuyentes hastiados de esperar que los atendieran.

El nuevo juzgado ya está funcionando desde hace unos días y la desprolija inauguración debió realizarse mientras parte del personal seguía trabajando y buscaba contener el mal humor del público.

Icare reconoció que la apertura del nuevo tribunal se demoró más de lo previsto y lo atribuyó a "los problemas edilicios" que impedían asignarle una locación específica.

En realidad la historia del Tribunal de Faltas 2 tiene origen hace más de cinco años y es anterior a este gobierno municipal. Los primeros intentos de ponerlo en marcha quedaron bloqueados por una impugnación al concurso que debía designar al futuro juez. Luego Icare se comprometió a ponerlo en funcionamiento cuando abrió las sesiones legislativas de 2005. A comienzos de este año reiteró la promesa y le puso fecha: "30 de marzo". Pero los plazos fueron cayendo una y otra vez sin novedad alguna. Finalmente el juzgado comenzó a funcionar este mes en el remozado piso superior de la terminal de ómnibus y la jueza Banfi Saavedra quedó designada de manera interina, hasta que el cargo se cubra por concurso.

El Tribunal Nº1 (que en los últimos años fue notoriamente insuficiente) seguirá a cargo de la jueza Cora Rondineau, en su sede de Mitre al 500.

Icare intentó elaborar un corto discurso de presentación del nuevo juzgado y ponderó las bondades del servicio a brindar, pero varios contribuyentes que observaban perplejos la escena empezaron a gritarle: "¿agilizar? qué van a agilizar si yo estoy aquí hace dos horas esperando por un papel. ¡Vergüenza les tiene que dar!".

El intendente acortó sus palabras y cedió el micrófono a la nueva jueza, quien alcanzó a decir que entendía "el descontento de la gente" y que la tarea a enfrentar es "sumamente difícil", por eso espera "ponerle todas las pilas".

Pero la atención derivó de inmediato hacia la puerta del recinto, donde una mujer que dijo haber sufrido en varias oportunidades la ineficiente atención en el Tribunal entabló un áspero diálogo con Icare, en el que no faltaron alusiones a la elección que el FpV ganó el domingo.

- Bariloche no está preparado para recibir esta cantidad de gente. Todo se improvisa- se quejó la mujer, quien se presentó como docente.

- Estamos haciendo muchas cosas, señora. Sáquese la venda de los ojos- le replicó Icare, ganado por la bronca.

- Hace horas que estoy aquí y no me atienden ¿quién me restituye a mí lo que perdí hoy en el colegio? ¿Y los días anteriores?

- Todo esto es para mejorar y lleva tiempo. Lo peor que hay es no ver y no reconocer- se quejó Icare-. No se queje de llena.

- No cayó ningún colchón en mi casa, le aviso- deslizó la mujer.

- Señora, no me ofenda, porque no soy de entregar colchones. ¿Sabe por qué nos vota la gente? por no entregar colchones. No sea maleducada.