Los restos del ex líder guerrillero Enrique Gorriarán Merlo fueron sepultados ayer en el cementerio de Chacarita, en presencia de sus hijas que llegaron especialmente desde Nicaragua.

Gorriarán Merlo murió el pasado viernes, a los 64 años, víctima de una complicación cardiovascular, cuando estaba por ser operado en un hospital porteño.

En la ceremonia para despedir sus restos estuvieron las hijas, Adriana y Cecilia, que viajaron desde Nicaragua para estar en el último adiós.

Además de familiares y amigos, estuvo presente Luis Cabrera, del Movimiento Sandinista Nicaragüense, quien leyó una proclama. Durante el velatorio, el cuerpo de Gorriarán Merlo estuvo cubierto por una bandera argentina y el féretro, rodeado de fotos de líderes revolucionarios como Ernesto "Che" Guevara, Augusto César Sandino, Carlos Fonseca, José de San Martín, Simón Bolívar, José Martí, Emiliano Zapata y Roberto Santucho, líder y jefe máximo del ERP.

Para cerrar el acto, un guitarrista interpretó una canción en homenaje al "Che", que desencadenó un momento de incomodidad porque la ceremonia se extendía demasiado y un grupo de personas esperaba a pocos metros, inhumar a un familiar.

Gorriarán Merlo, estaba dedicado a la formación del Partido para el Trabajo y el Desarrollo (PTD) con el propósito de reinsertarse en la vida política democrática de su país.

Vivió casi 30 años en la clandestinidad, peleando primero en Argentina como uno de los principales líderes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) y después en varios países latinoamericanos, entre ellos, en Nicaragua, a favor de la lucha del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).