Estudiantes venía de cuatro fechas sin victorias y anoche cortó la mufa. Venció a Independiente, por 2-1, para meterse, otra vez, en los puestos de avanzada del Apertura. Además, la hizo completa porque no dejó que su rival se suba a lo más alto del torneo.

Ayudado por las desinteligencias defensivas del "rojo", el 'Pincha' fue el que tuvo las mejores chances en la primera etapa. Antes del gol de Calderón, el equipo de Simeone había hecho méritos como para estar arriba, pero la falta de puntería y alguna intervención de Ustari, le impidieron abrir el marcador.

El once de Burruchaga inquietó a Andújar con remates desde larga distancia, pero ni Montenegro ni Orteman pudieron con el '1'.

A falta de seis minutos para el final de la etapa, en una desgraciada jugada Lorefice le entró mal a Huerta, que sufrió fractura expuesta de tibia.

En la jugada siguiente, Pavone desbordó a Abraham y metió un centro exacto para la cabeza de Calderón, ante la pasividad de Guillermo Rodríguez. 'Caldera' volvía a gritar después de 368 minutos sin convertir.

El complemento arrancó a pura emoción en el Centenario. A los 3, Orteman armó una buena jugada por la izquierda, y su centro fue capitalizado por Sosa, que le ganó a toda la defensa platense.

Pero Independiente tuvo su lapso fatal. Primero a los 5' Alayes aprovechó (otra vez) un error del fondo rojo. Gioda pifió un balón que era de Ustari y el defensor aprovechó el regalo. Inmediatamente después del gol, Lorefice bajó a Braña y dejó a su equipo con diez. En un minuto, el equipo de Burruchaga quedaba otra vez abajo en el marcador y en inferioridad numérica.

Las pálidas siguieron con la expulsión de Rodríguez y, contra todos los pronósticos, Independiente contó con un par de chances para empatar. El "local" se lo perdió de manera increíble por intermedio de Verón y de Pavone, pero el "rojo" casi da un golpe.

No lo dio y, por lo visto en los 90, se hizo justicia.