Jueves 21 de Septiembre de 2006 Edicion impresa pag. 18 > Politicas
El entorno

Es posible que la desmentida enfática y la documentación exhibida ayer por Meana y por Otheguy alcancen para clausurar la polémica. Pero aun cuando la candidata jamás haya cobrado dos sueldos en la administración pública, lo que debe inquietarla es que la denuncia formulada por Encuentro -aun siendo errada- suene tan verosímil.

Meana subrayó una y otra vez que su concepto del honor es para ella una herencia de familia y que una duda sobre su honestidad es el peor insulto que puede recibir.

Muchos se preguntarán entonces por qué forma parte sin mayores objeciones (al menos públicas) de un partido y un gobierno que en materia de corrupción está lejos de tener un legajo inmaculado.

El vaciamiento del Banco Provincia, los escándalos del Cedepre y de Lotería, las facturas truchas en Altec y el reciente reparto de celulares, son apenas parte del muestrario.

Aunque la trayectoria personal y profesional de Meana no admita reproches, es el entorno lo que la hace vulnerable.

DANIEL MARZAL

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