VIEDMA (AV).- La Nación abre en Río Negro oficinas de registro de empleo cuando el padrón del Plan Jefas de Hogar mantiene una disminución mensual de unos 150 beneficiarios, que equivale a casi un 10 por ciento en el año.

La Dirección de Empleo de Trabajo de Nación confirmó que se abrieron oficinas de "intermediación laboral en Villa Regina, Roca y Cipolletti. Proximamente -en octubre- se concretaría en Viedma y ya se gestionan la de Bariloche".

Por su parte, el Programa Jefa/Jefes de Hogar sigue con su sostenida caída de beneficiarios, pasando de 17.385 en octubre pasado a los 15.580 desocupados con cobertura en setiembre. Una disminución del 10 por ciento. En cuatro años, la reducción superó los 10 mil beneficiarios.

Las bajas automáticas responden a que los beneficiarios aparecen en registros de personal activo (con trabajo) o, también, por otros incumplimientos, como que sus hijos a cargo superan la edad necesaria para recibir ese pago de 150 pesos mensuales. Estas exclusiones de beneficios no se pueden compensar con altas ya que el registro para nuevos beneficiarios está cerrado desde hace más de dos años.El esquema de "intermediación laboral" pretende acercar la actual demanda empresarial y la oferta de desocupados, alcanzando a beneficiarios del Plan Jefe pero también a otros miembros del mercado laboral.

El director Néstor Marchetto explicó que Nación cumple con planes territoriales para precisar "las demandas laborales y, posteriormente, plantear los cursos de capacitación".

Marchetto afirmó que las oficinas de intermediación laboral se acuerdan con los municipios pero se deben instalar fuera de la sede gubernamental aunque los agentes y el coordinador debe pertenecer a la intendencia. La Nación aporta el equipamiento informático, y también con la capacitación que se acuerde según la demanda laboral.

Las principales orientaciones de empleos se dirigen a la construcción, comercio y actividades turísticas. Los potenciales empleadores obtiene un padrón de los trabajadores inscriptos, con posibilidades de capacitación.

En diálogo con "Río Negro", Marchetto resaltó los resultados de las agencias habilitadas porque "concurren y se inscriben en promedio unas 20 personas por día" a pesar de lo reciente de sus aperturas.

El funcionario nacional dijo que esos registros están destinadas a desocupados y subocupados que pertenezcan o no al programa Jefas.
Este plan laboral se lanzó a principios de 2002 como "respuesta a la inclusión social para más de dos millones de mujeres y hombres, afectados por una crisis sin precedentes". El objetivo fue "promover la cultura del trabajo y mejorar la empleabilidad e inserción laboral".

Desde el cierre del registro, la Nación implementó diferentes mecanismo en la búsqueda de mecanismo para la reincorporación a estos beneficiarios al mercado de trabajo. Por ejemplo, beneficios a empresas privadas para que contraten a esos desocupados. Los resultados fueron pobres.

Esta intermediación está direccionada en igual sentido, siempre con marcadas características que se advierte con la inserción laboral: los varones logran empleos registrados con mayor facilidad que las mujeres. Si bien, un 70 por ciento de los beneficiarios del Plan Jefas son mujeres cuando se revisan las estadísticas sólo un 34 por ciento de ellas están incorporadas a empleos registrados.