CHOS MALAL (ACHM).- Mañana se realizará en Zapala el primer juicio oral y público por faltantes de dinero en la comuna chosmalense: se trata de una de las causas que surgieron de la principal, donde se investigó el fantante de más de 100 mil pesos de las arcas municipales. En esta oportunidad se sentarán en el banquillo de los acusados Silvia Cristina Villar, Fabio Enrique Tapia, acusados de peculado y Sergio Bally de encubrimiento y/o incumplimiento de lo deberes de funcionario público.

El tribunal juzgador, conformado por los camaristas Oscar Rodeiro, Víctor Martínez y Enrique Modina comenzará a analizar mañana en juicio oral y público la responsabilidad que le cabe a Villar, Tapia y Bally en los hechos que se les imputan.

La causa, que se desprendió de la principal, fue investigada en el Juzgado de Instrucción de Chos Malal. Oportunamente desde la oficina de prensa del Tribunal Superior de Justicia se informó que los hechos sucedieron cuando Villar ostentaba el cargo de Coordinadora de Recursos Financieros y Tapia como responsable del sector Cobranzas de la municipalidad de Chos Malal. En tanto Bally que es la otra persona que va a juicio era por entonces el secretario de Haciendas y Finanzas.

Tanto Villar como Tapia, que son empleados municipales, están acusados de dos hechos de peculado en perjuicio de las arcas municipales.
Los mismos fueron separados de sus cargos y enviados a otros puestos de trabajo, siempre dentro del ámbito municipal y finalmente el intendente Carlos Lator decidió suspenderlos preventivamente sin goce de haberes, medida que tuvo alcance para la totalidad de los trabajadores que están siendo investigadas en las distintas causas por faltantes de dinero e irregularidades.

Para la fiscalía está probado que Villar y Tapia se quedaron con 1.647,59, dinero que les había sido confiado en razón de sus cargos. Los hechos habrían sucedido entre el 27 y 28 de junio del año pasado y los dos están relacionados con un faltante de 37,30 y luego de 1.610,29. El fiscal solicitó la elevación a juicio y, como estima que correspondería pena superior a los 3 años de prisión, la causa se remitió a Zapala.

En lo que respecta a Bally, que fue quien realizó la denuncia en la fiscalía en la causa principal, fue investigado por encubrimiento y/o incumplimiento a los deberes de funcionario público dado que no denunció en su momento la sustracción del dinero. El ex funcionario se alejó del municipio renunciando al cargo para regresar a su lugar laboral anterior, esto es Zona Sanitaria III.

Mañana brindarán su testimonio ante los camaristas siete testigos que fueron citados para determinar la responsabilidad de los tres implicados en esta causa. De ellos, seis son empleados y uno es un perito contador. Cabe recordar que los hechos de corrupción marcaron un precedente en el municipio chosmalense durante la gestión del ex intendente Oscar Koenig que finalmente renunció al cargo el 2 de mayo de este año.