CIPOLLETTI (AC).- Un giro de 360 grados tomó el caso que mantenía en vilo a la comunidad educativa de la escuela Nº248, en el norte de Cipolletti, porque el alumno de 15 años que referenciaba tenía violentas hacia compañeros, docentes y directivos de forma intempestiva y sin mediar ninguna explicación de familiares o allegados, abandonó el establecimiento, dejó de ir a clases y se ignoraba su actual situación.

El lunes último -cuando la semana anterior el muchacho habría concurrido con una especie de "faca" o cuchillo de tipo casero- los padres decidieron no mandar a sus hijos a clases hasta tanto las autoridades actúen, pero la mayoría no quería la exclusión del adolescente.

Por este tema hay una causa abierta en el juzgado Penal 23 de Alejandra Berenguer -la madre de un alumno denunció amenazas- está interviniendo, en la instrucción, la comisaría 24 y operan igualmente el juzgado de Familia y Minoridad, y Promoción Familiar del Ministerio de Familia.

"No es bueno para el sistema que el chico haya dejado la escuela. Lo correcto sería que vuelva y que se vaya produciendo una adaptación con la ayuda de todos, y obviamente con el convencimiento de cambio de parte del propio involucrado", confió una supervisora de amplia experiencia docente.

La directora Graciela Bugallo, confirmó que luego del parate del lunes las clases continuaron con normalidad pero que el adolescente abandonó la escuela.

Por este tema llegó desde Viedma la Directora de Nivel Primario del CPE.