BUENOS AIRES (Télam).- Once personas, nueve de ellas niños, resultaron heridas ayer al caer el ascensor en el que se encontraban desde el cuarto piso hasta el segundo subsuelo de una institución de la colectividad armenia, donde habían realizado actividades deportivas, en el barrio porteño de Palermo.
La mayoría de los heridos son alumnos de la escuela primaria del Instituto Educativo San Gregorio El Iluminador, que habían concurrido al Instituto Marie Manoogian, ubicado enfrente -en Armenia 1.322- y perteneciente a la Unión General Armenia de Beneficencia, para practicar natación.
Poco después de las 9.30, el ascensor cayó desde el cuarto piso hasta el segundo subsuelo, lo que causó heridas a todos los ocupantes, de los cuales la más grave es una docente, que tuvo fractura expuesta en sus dos piernas, y dos niños de nueve años cada uno, con traumatismos en la frente y en la rodilla.
Las ocho personas restantes, otra docente y siete niños de entre nueve y diez años, tuvieron heridas leves aunque algunos estaban muy conmocionados y fueron atendidos en el lugar por médicos del (SAME).
Los tres heridos más graves fueron internados en el Hospital Durand, donde un médico informó que "la docente tiene fracturas expuestas y será intervenida, mientras otro nene de nueve años tiene una fractura en una de sus rodillas".
Los directivos del Instituto Manoogian no mencionaron si el ascensor estaba a no sobrecargado al momento del accidente y sólo se limitaron a decir que el lunes había sido revisado por los inspectores técnicos, quienes le entregaron un informe a los bomberos. "En este momento sólo nos interesa saber el estado de los heridos; sabemos que están todos bien y que la mayoría de ellos está en su casa; los hechos objetivos los determinarán las pericias que se están efectuando", aseguró a la prensa uno de los directivos. Los ascensores de la institución, agregó, "están en permanente observación; se usan para deportistas y su control está regido dentro de las normas vigentes, tanto para las instituciones como para los colegios".
El gobierno porteño explicó que el control de los ascensores en la ciudad de Buenos Aires se realiza en forma compartida con empresas, las cuales deben estar registradas, con un certificado de conservación en un registro de conservadores que lleva adelante la Dirección de Fiscalización de Obras.