SAN MARTIN DE LOS ANDES (ASM).- "No tengo nada que ver. Ya fui indagado en su momento y dije lo que tenía que decir. No sé nada de Automotores Orletti...". El general retirado Eduardo Rodolfo Cabanillas fue enfático en negar vínculo alguno, cuando este diario lo consultó telefónicamente sobre su -como él mismo la calificó- "sorpresiva" detención en relación con el funcionamiento de aquel centro clandestino.

Desde hace seis años, Cabanillas es vecino de San Martín de los Andes, donde vive con su esposa en el área Rincón Radales, camino a lago Lolog. El general retirado fue titular del Regimiento 4 de Caballería de Montaña, con asiento en esta ciudad, a fines de los años 80.

Cabanillas suele tomar café y leer los periódicos y diarios regionales en una céntrica confitería, cada domingo. Su presencia es inadvertida para la mayoría, como no sea la de una persona integrada a la vida local, como un sanmartinense más.

Sin embargo, la noticia de su detención fue comentada en círculos políticos de la ciudad, aunque Cabanillas no tiene aquí ningún tipo de relación partidaria o política pública.

En cualquier caso, conocida la decisión del juez Daniel Rafecas, este diario intentó dialogar con Cabanillas, a sabiendas de que permanece detenido en dependencias de Gendarmería Nacional en Buenos Aires. Pero al primer llamado de un teléfono móvil con prefijo regional, del otro lado de la línea respondió el propio Cabanillas.

El militar retirado se excusó de dar precisiones sobre su situación, atento a la nueva instancia judicial, pero en el breve diálogo no eludió preguntas sobre su eventual participación en los hechos bajo pesquisa de Rafecas.

Recordó que "esta investigación se desprende de una acusación del (escritor) señor (Juan) Gelman (cuyo hijo fue muerto en "AO"), pero yo nunca tuve nada que ver con ese tema, y eso ya lo había dejado muy claro cuando la causa la llevaba (Rodolfo) Bagnasco (en 1999). En esos años yo estaba en la SIDE en comisión y no tenía relación con aquello...".

En rigor, el propio Cabanillas dijo que luego de haber sido interventor en la municipalidad de Cipolletti, desde el golpe del 76 y durante tres meses, viajó a Buenos Aires para continuar sus cursos en la escuela Superior de Guerra, pero fue destinado a la SIDE como custodio del jefe de entonces, el general Otto Paladino. Se mantuvo en esas funciones a lo largo de 4 meses. Para sostener su desvinculación con los manejos del centro clandestino "Automotores Orletti", recordó que "yo no era oficial de Inteligencia". "En fin ya me he puesto a disposición de la Justicia una vez y lo vuelvo a hacer con plena confianza en Dios y en la verdad...", concluyó.

El general retirado Eduardo Rodolfo Cabanillas fue detenido en la causa en la que se investigan los hechos ocurridos en el centro clandestino de detención, conocido como "Automotores Orletti". Entre otros, en la causa se investiga el homicidio del hijo del escritor Juan Gelman. Se señala que aquel centro dependía de la SIDE.Las especulaciones indican que Cabanillas era la referencia superior de Aníbal Gordon, a cargo de Automotores Orletti. Pero, como ya se citó, el militar retirado insistió ante la consulta de este diario en que "nunca tuve nada que ver" con "AO".

Según los trascendidos en torno de la decisión del juez Rafecas, a Cabanillas se lo responsabilizaría por los homicidios agravados de cinco víctimas, cuyos restos fueron hallados en octubre de 1976 dentro de tambores sellados, rellenos con cal y cemento y arrojados al río Luján.