La inflación de agosto se habría ubicado entre el 0,3 y 0,4 por ciento, según datos que trascendieron de fuentes gubernamentales. De cumplirse los datos preliminares, el incremento del índice de precios al consumidor desde enero no habría superado el 6 por ciento cumplidos ocho meses.

La aspiración del Gobierno es cerrar 2004 con un alza del costo de vida de un dígito, para lo cual durante el último cuatrimestre la tasa promedio mensual no debiera superar el 1 por ciento. Los datos oficiales serán anunciados el martes por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

Agosto es un mes históricamente con baja inflación debido a que no confluyen factores estacionales que pueden impulsar una suba de precios, sino que por el contrario juegan a favor la indumentaria y el turismo. No obstante, en esta oportunidad existieron subas excepcionales en las cuotas de los colegios privados y en los taxis, entre otros servicios, que impactarían en el índice.

Durante agosto, los padres de alumnos de colegios privados recibieron la primera cuota del ajuste extraordinario por compensación de costos, que en algunos casos alcanzó hasta el 30 por ciento de la mensualidad.

Por otra parte, se elevó un 9 por ciento la tarifa de los taxis que circulan por la Capital Federal. Otro factor que influyó en el costo de vida es el sostenido valor de los alquileres, situación que el gobierno pretende contener mediante una ampliación de la oferta de crédito hipotecario.

Estos incrementos se habrían compensado por bajas en rubros que responden a la estacionalidad como indumentaria y parcialmente turismo. En agosto se mantuvieron las liquidaciones de la temporada invernal que comenzaron a fines de julio y aún no saltaron a las vidrieras las colecciones de verano. Respecto del turismo, habría un repunte respecto de los años anteriores, ya que en 2006 las vacaciones de invierno incluyeron una semana de agosto. No obstante, en el ba

lance general el incremento se habría amortiguado en el efecto estadístico de las tres semanas posteriores. Dentro de los alimentos no se esperan grandes modificaciones, debido a la vigencia de los acuerdos de precios y a que no se habrían detectado subas en productos frescos y carnes. De esta forma el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que mide la línea de indigencia y está integrada mayoritariamente por alimentos seguiría en torno a los 390 pesos para una familia tipo. En el caso de las Canasta Básica Total (CBT) se espera una leve modificación desde los 858,99 que costaba en julio por efecto de la suba de los servicios. (DyN)