BUENOS AIRES (Télam).- El popular payaso Piñón Fijo, alejado de la pantalla chica desde hace dos temporadas acaba de lanzar su nuevo CD, "Fragancias de infancia", con temas de su autoría y con el plus de incluir algunos grabados en el cine España, de la localidad cordobesa de Deán Funes, junto a un coro de chicos del lugar. De visita en esta ciudad, Fabián Gómez -tal su nombre en los documentos-, se mostró interesado por la historia reciente de Córdoba, que estudió "no por la escuela, lógicamente, sino por interés propio".
"En la familia siempre estuvimos muy empapados por lo que sucedía en las épocas duras, porque hubo un primo que ya no estaba más y soportábamos frases como 'en qué habrá andado este chico' por la parte derecha de la familia", ejemplificó ante Télam.
El disco de Piñón "fue comenzado a gestar hace un año y medio, más o menos, y en el medio hice otro disco como intérprete con canciones de María Elena Walsh, Miliki, Carlos Balá y Los Arroyeños y eso me dejó más tiempo para pulir más artesanalmente éste como compositor".
"Hacer esto me da una bocanada de aire fresco en mi vínculo con los chicos -apuntó- ya que en un disco uno va plasmando los aprendizajes y las elecciones que va madurando, no sólo en letra y música sino en la cuestión tecnológica".
El payaso dijo haber disfrutado "de pe a pa" la manufactura de la grabación, ya que ese es su hobby: "Sacar un disco en el sello Sony y poder decir que lo hice desde la primera corchea hasta el proceso de masterizado, es toda una satisfacción".
El mejor momento para Piñón fue cuando los técnicos profesionales le dijeron: "Suena bien, sale con fritas". "Todo eso fue muy 'groso', yo me animé a plantearlo porque estaba 'a full', no sé si alguien más encasillado, más estructurado lo hubiera hecho".
"Obviamente lo hice chequear, les dije que lo controlaran ellos porque puede haber frecuencias que yo no escucho y ustedes sí porque con los equipos que tienen pueden distinguirlas. A nivel tecnológico y a nivel vivencial fue algo muy lindo", confió.
El famoso payaso declaró haber descubierto varias nuevas cosas en lo musical, "una especie de pre plataforma musical, me fui al cine de cuando yo era niño y lo grabé en vivo con los chicos de las escuelas de Deán Funes".
Sobre el marcado acento cordobés que se le hizo notar, Piñón afirmó haber sido siempre "muy cordobés, pero quizá hablando en un tono alto en un programa a uno se le va la tonada, pero cuando uno se distiende y entramos en confianza hablamos como en casa".
Acerca del atuendo que utiliza para aparecer en público, Piñón Fijo dijo que es "un sacerdocio; yo me siento tan o más libre así que cuando estoy 'de civil', ocasión en que soy muy de perfil bajo y disfruto mucho del anonimato, así que también estoy cómodo".
Esa dicotomía no perturbó su relación con su familia "y con la convivencia con mis hijos adolescentes que tienen casi la edad de mi personaje ha sido siempre muy placentera y pinta para seguir siéndolo desde la madurez de ellos".
"Hemos disfrutado mucho de esta convivencia con ellos y con mi compañera, con la que hemos compartido esta aventura de Piñón Fijo; a ellos les tocó ser parte de nuestro equipaje de mochileros, los dos bebés en brazos, con los que salíamos a buscar un cámping y hacer un show para pasar la gorra", recordó.