NEUQUEN (AN).- La competencia de las súper lanchas Power Boat F1 en el río Limay y en la zona del Paseo de la Costa fue cancelada por los organizadores luego de la fuerte presión que realizaron en conjunto grupos ecologistas y remeros de la región.

La decisión fue confirmada ayer al mediodía por el presidente de la Corporación para Desarrollo Integral de Neuquén (Cordineu), César Gass, explicó que se trató de una cancelación y no de una suspensión.

El funcionario dijo que desde la corporación a su cargo "no hubo una autorización formal" aunque sí un aval para que los organizadores hagan las gestiones ante diferentes organismos tales como la dirección de Recursos Hídricos de la provincia y la subsecretaría de Medio Ambiente.

Con todo, a la vez que ecologistas y deportistas ajustaban la presentación de un recurso de amparo, Gass confirmó que no se realizará la competencia que alimentó una temprana polémica.

"No habiéndose expedido los organismos pertinentes, la corporación decidió suspender la actividad; no vamos a poner en debate un proyecto de desarrollo que para nosotros es fundamental", afirmó Gass a este diario.

Poco después, a través del abogado Daniel Muñoz se presentó el recurso de amparo a la jueza federal del fuero civil Carolina Pandolfi.

"Sabíamos que la suspensión ya estaba definida pero consideramos pertinente hacer la presentación para generar un precedente: queremos bajar las expectativas en cuanto a cualquier otra posible competencia. No estamos dispuestos a tolerar que nuestro río se transforme en otro Puerto Madero", afirmó Cecilia Komacek, integrante del grupo que opuso al evento.

Komacek fue más allá. Dijo que en lo sucesivo deberán atenderse los proyectos que apuntan a la construcción de muelles y amarraderos para embarcaciones con motor.

La representante de los remeros y de grupos ecologistas destacó la gestión y el compromiso de la Defensoría del Pueblo de Neuquén que "nos asesoró, acompañó y respaldó en esta iniciativa".

Los organizadores, la empresa Evenpro, anunciaron una conferencia de prensa para mañana en lugar a confirmar. Allí defenderán la actividad y darán cuenta del peso que tiene en el calendario nacional la regata Power Boat.

La lanchas de competición pueden alcanzar 200 kilómetros por hora y ofrecen un espectáculo en el que, sobre todo, se destaca la potencia de las máquinas. La actividad fue promocionada por la empresa Evenpro y Cordineu hacía las veces de anfitrión.

Para el palista Matías Alak, una carrera de estas súper lanchas era "un atentado para la fauna ribereña: por contar sólo un caso, en esta época es cuando los cisnes cuellos negro arman su nido y de haber algún inconveniente, es decir algo que los asuste, perdemos una generación de estas aves", sostuvo.

Alak explicó que a lo largo de los últimos días, con documentación de distintos organismos y con asesoramiento de biólogos, elaboraron un informe en el que se detalla el impacto que tendrían las lanchas Power Boat en la zona del Paseo de la Costa.

"Era una locura lo que querían hacer; estamos hablando de máquinas que en cuatro minutos pasan de 0 a 100 kilómetros por hora, eran diez lanchas que se iban a mover en un tramo de 600 por 100 metros... ese no es el trato al río que históricamente le hemos dado", sostuvo Alak en diálogo con "Río Negro".

El remero explicó que en este tipo de competencias puede ser menos riesgosa en "ríos como el Paraná donde tenemos grandes profundidades, pero acá estamos hablando de lugares que no tienen más de seis metros", fue más allá.

"No queremos la competencia ni el 2 ni el 3 de septiembre, ni nunca, este es nuestro río cristalino y la decisión es preservar su fauna", cerró Komacek.