La ministra de Economía, Felisa Miceli, y el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, anunciaron el envío al Congreso de un proyecto de ley de Incentivos para la adquisición y construcción de vivienda única, familiar y permanente.

Al dar detalles de la operatoria, Miceli dejó en claro que los bancos no recibirán ayuda del Estado al remarcar que "desde el sector público no se realizará ningún subsidio de tasas".

Las entidades privadas habían expresado que no están en condiciones de financiar créditos hipotecarios al 7,5% anual.

El Gobierno buscó, según el planteo que Moreno transmitió a las entidades financieras, que reduzcan a la mitad el costo del crédito hipotecario que se destine a los inquilinos.

Pero la banca privada había expresado el martes las limitaciones que encuentra para cumplir con ese propósito oficial.

Sobre este tema, Miceli agregó que los montos de los créditos "tiene que ver con las propias operatorias que fijen los bancos", se limitó a responder.

El presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), Mario Vicens, afirmó que "en las condiciones actuales no se pueden dar créditos [hipotecarios] al 7,5%", como les solicitaron.

La medida se inscribe en el plan impulsado para facilitar el acceso al crédito hipotecario a los inquilinos, que entrará en vigencia el próximo viernes y al que ya adhirieron trece bancos.

La ministra formalizó el anuncio junto al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, en la sala de conferencias de Casa de Gobierno, luego de mantener un encuentro de cerca de una hora con el presidente Néstor Kirchner.

"Mediante este proyecto se busca incentivar el acceso al crédito por un lado y la construcción de viviendas por otro para consolidar mediante estos dos incentivos el acceso de la población a la casa propia", señaló la funcionaria.

En lo que respecta a los planes que los bancos saldrán a ofrecer en el corto plazo, Miceli dijo que las entidades serán quienes definan "la operatoria crediticia", para luego remarcar que desde el Estado "no se subsidiará la tasa de interés".

El proyecto que de ley consta de dos partes: una referida a los créditos hipotecarios para inquilinos y la otra relativa a los incentivos fiscales para empresas constructoras. En los fundamentos, según Miceli, el proyecto introduce "un nuevo sujeto de crédito -el inquilino-" que deberá demostrar su capacidad de pago exhibiendo "la documentación que acredite que ha abonado puntualmente los alquileres de la vivienda durante ocho meses consecutivos".

La titular del Palacio de Hacienda dijo que los beneficiarios del crédito podrán acceder "a una vivienda asimilable a la que alquilan, con una cuota también asimilable

al valor del alquiler que pagan". Es decir que una familia que alquila una vivienda por 800 pesos, pagará una cuota similar al monto del alquiler, con las mismas comodidades. El segundo título de la ley, que para Miceli expresa la "voluntad" del Gobierno de respaldar las medidas para ampliar la oferta de vivienda, comprenden a los incentivos para las constructoras vía devolución anticipada del IVA.

El beneficio tributario, de acuerdo al proyecto de ley, comprenderá a la construcción de "nuevas unidades de vivienda o a la terminación de viviendas que no superen los 120 metros cuadrados".

Miceli puntualizó que el Banco Central adecuará las características de los créditos y que trece entidades ya adhirieron a la nueva operatoria hipotecaria, entre los que se encuentran los bancos Ciudad, Provincia, Nación, Francés, Galicia, Nuevo de Santa Fe, Nuevo de Entre Ríos, Santa Cruz, San Juan, Credicoop, Macro, Hipotecario y Río. (DyN/Télam)