SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Un joven que conducía su auto a velocidad excesiva y mató a un muchacho e hirió a otro al invadir la vereda por la que circulaban recibirá una pena de 2 años y medio en suspenso y quedará inhabilitado para conducir por el doble de tiempo.
La sentencia la dictó el juez Gregor Joos luego del acuerdo al que arribaron en un juicio abreviado el agente fiscal, el querellante y el defensor del acusado, Juan Marcos Bancala, quien escapó del lugar sin prestar ningún auxilio después de haber embestido a las víctimas.
El hecho juzgado ocurrió a las 7.15 del 21 de agosto de 2005, cuando Bancala conducía su Fiat 128 por la calle Beschted, en dirección al norte, a velocidad excesiva y sin tener en cuenta que la zona está densamente poblada y es transitada por abundantes peatones, según explicó el fiscal en la elevación a juicio. Agregó que unos veinte metros antes llegar a la intersección con La Paz, el imputado efectuó una maniobra brusca, subió con su auto a la vereda cardinal Este y embistió a los hermanos Pablo Gustavo Vega y Maximiliano Vega, de 21 y 16 años, quienes caminaban en dirección al sur en compañía de otras dos personas. Como consecuencia del impacto Pablo murió casi en el acto, y Maximiliano sufrió fractura desplazada de la diáfisis del fémur, que requirió cirugía y colocación de una prótesis intramedular para alinear el hueso, entre otras graves lesiones.
El hecho fue calificado como "homicidio culposo agravado por la conducción imprudente de automotor, en concurso ideal con lesiones culposas agravadas por el resultado grave de las mismas y la conducción imprudente de automotor", pero la huida del lugar no fue considerada agravante durante la instrucción, donde además trataron de ocultar la identidad del homicida.
La pena prevista para quien comete un homicidio culposo mediante la conducción imprudente de un automotor es de 2 a 5 años de prisión.