NEUQUEN (AN)- La fiscalía de Estado pidió ayer al jury la destitución de Facundo Trova, el fiscal penal que en enero fue detenido con 16,87 gramos de marihuana en su poder. Lo acusó de "mal desempeño". Además solicitó que se lo inhabilite para ejercer cargos públicos "por el mínimo tiempo establecido", es decir 2 años.

En cambio la defensa reclamó la absolución por falta de pruebas, y propuso que "si se considera inconveniente que siga siendo fiscal, se lo puede sacar de esa función. Por ejemplo, podría ser un buen defensor. ¿Por qué destituirlo?".

El Jurado de Enjuiciamiento leerá la sentencia el próximo 25 de agosto a las 13.

Trova no asistió ayer a los alegatos, que se pronunciaron desde las 16 en una despoblada Legislatura. La semana pasada, durante la primera audiencia del jury en su contra, se retiró porque a su criterio el Jurado no es imparcial. Igual siguieron juzgándolo en ausencia, y lo representa un defensor oficial.

El fiscal, de 33 años, está suspendido en el cargo desde el 8 de mayo pasado y cobra la mitad de sus haberes.

Ingresó al Poder Judicial en agosto del 2004 como parte del fenomenal proceso de renovación que se inició con el recambio de vocales en el TSJ. Un año después fue ascendido, en un controvertido concurso, a fiscal titular.

Raúl Gaitán, como fiscal de Estado, tuvo a su cargo la acusación. En un breve alegato que leyó ante el tribunal señaló que está probado que Trova tenía la marihuana en su poder cuando lo detuvieron en el aeroparque metropolitano, el 16 de enero pasado.

Añadió que comparte la filosofía del fallo judicial que lo absolvió en sede penal, pero aclaró: "no acusamos qué se ha hecho sino quién lo ha hecho", y en ese sentido afirmó que "ningún funcionario puede tener estupefacientes en su poder".

También pidió que quede claro que "jamás acusé a Trova de adicto. De lo único que se lo acusa es de que un día y a una hora determinada, tenía estupefacientes en su poder".

El alegato del defensor oficial Daniel Geloni fue más extenso y giró sobre dos ejes: si está probado el hecho que se le atribuye y si representa un caso de mala conducta funcional.

Respecto del primer punto afirmó que la única prueba en contra de Trova, es decir el paquete de marihuana que tenía en su bolsillo, fue incautada sin orden judicial por lo que su incorporación al proceso resulta inconstitucional.

Como Trova admitió en varias ocasiones que la marihuana le pertenecía (dato que el fiscal de Estado puso de relieve), Geloni lo justificó señalando que fue una estrategia de defensa para lograr un cambio en la acusación en su contra y su posterior sobreseimiento. "Por eso las supuestas confesiones", dijo, "y quedó en el tintero plantear la nulidad del secuestro".

En cuanto al segundo aspecto, afirmó que "se lo quiere condenar a futuro en base a una hipótesis, que sería: al encontrársele marihuana se presume que es adicto y que eso podría afectar su desempeño en el cargo".

Geloni señaló además que "no encuentro equiparación entre la mala conducta que se le atribuye a Trova con el mal desempeño, que está referido a lo funcional, no a la vida privada".

Tras pedir que lo absuelvan, planteó que "si se considera inconveniente que siga siendo fiscal, lo pueden sacar de esa función. Podría ser un buen defensor. ¿Por qué destituirlo? No se merece que lo echen como a un perro. Hay que darle otra oportunidad, imponiéndole un tratamiento si es que se tiene por probado que posee una adicción".

El jurado que dictará sentencia está integrado por Felipe Cía, Jorge Sommariva y Eduardo Badano por el TSJ; Oscar Gutiérrez y Horacio Rachid por la Legislatura y Graciela Cardone y Raquel Fabani en representación del Colegio de Abogados.