LA PLATA (Télam).- La defensa del odontólogo Ricardo Barreda, condenado a reclusión perpetua por los homicidios de sus dos hijas, su mujer y su suegra, pidió ayer que la Cámara Penal de feria defina si el detenido puede recuperar la libertad.

La presentación la hizo ayer a la tarde el abogado Eduardo Gutiérrez, quien radicó un "hábeas corpus" por considerar que la indefinición sobre el cómputo del tiempo que Barreda lleva detenido afecta una garantía constitucional.

Gutiérrez explicó que en el escrito pidió que sea la Sala de la Cámara Penal de La Plata que está en turno durante la feria la que resuelva si el odontólogo puede recuperar la libertad en los próximos días.

Es que Barreda fue beneficiado la semana pasada por un fallo de la Sala I del Tribunal de Casación que declaró inconstitucional el artículo 24 del Código Penal, con lo que habilitó que se compute doble el período que el odontólogo lleva detenido desde 1992 cuando cometió los crímenes y sin sentencia firme.

La resolución iguala las penas de prisión a la de reclusión, lo que habilita a computar doble el período de detención desde noviembre de 1994, que habilitaría a Barreda a obtener la excarcelación o a darle por cumplida la pena.

Según el fallo de Casación, el cómputo lo debía hacer la Sala I de la Cámara Penal de La Plata, pero el expediente ingresó justo con el inicio de la feria judicial, por lo que la definición se iba a demorar 15 días.

Barreda fue detenido el 15 de noviembre de 1992 acusado de haber asesinado a tiros a su esposa Gladys Mac Donald, de 57 años; su suegra, Elena Arreche, de 86; y sus dos hijas, Adriana, de 24 y Cecilia, de 26, en la casa que habitaban en la calle 48 entre 11 y 12, en el centro de La Plata.

El odontólogo utilizó para el crimen una escopeta calibre 12.70.