NEUQUEN (AN).- De los cerca de 14.500 expedientes que el Tribunal de Faltas giró al municipio para su ejecución por la vía judicial desde el 2002 a octubre del 2004, sólo 2.220 fueron efectivamente cobrados.

El 85% de los sentencias permanecerían impagas y en el caso de uno sólo de los juzgados representan un monto no cobrado de casi dos millones de pesos.

Así, una de cada seis intimaciones efectuadas por el municipio desde el 2002 al 2004 fueron cobradas. Este cúmulo de sentencias representa casi la mitad de las labradas por el Tribunal de Faltas. El restante 39% sería abonado voluntariamente.

Lo más grave es que la gran mayoría de los infractores no recibe castigo algunos pese a haber cometido faltas que, en algunos casos, pusieron en riesgo la vida de terceras personas.

Durante tres años ambos juzgados del Tribunal de Faltas giraron a la comuna 14.447 actas para que desde el ejecutivo sean cobradas mediante intimaciones. No obstante, durante esos años sólo 2.220 fueron efectivamente pagadas, alcanzando sólo el 15,3% de las actas remitidas.

En el caso del Juzgado II, a cargo de Jorge López, de 2.192.787 pesos girados para su ejecución judicial la comuna sólo cobró el 9,67%, recaudando un

total de 211.982 pesos. El bajo nivel de pago y de capacidad de cobro del municipio implica que sólo en este juzgado permanecían impagos a fines del 2004 casi dos millones de pesos.

En este juzgado se giraron para su ejecución 7.448 sentencias de las cuales sólo 904 fueron pagadas, ascendiendo a la magra suma del 12%. En tanto que en el Juzgado I, fueron 9.751 las actas giradas y de las cuales el 18.8% (1.392 actas) lograron ser cobradas por la comuna.

Los datos forman parte de un informe especial elaborado por la Sindicatura Municipal a pedido del Concejo Deliberante donde desde hace una semana se trata la creación del organigrama de los juzgados municipales, que podría derivar en una recategorización para sus empleados.

En el informe se da cuenta de que "siguen siendo bajos los índices de cobrabilidad de las sentencias dictadas por los juzgados" y se señala que además "resulta insuficiente la actividad desarrollada en torno a la remisión a la vía judicial de sentencias condenatorias y en rebeldía". Precisamente son las sentencias que establecen condenas y aquellas en las que los infractores se declararon en rebeldía al momento de pagar las que son giradas por los juzgados al municipio para su ejecución.

En su mayoría se trata de sanciones derivadas de los controles de tránsito realizados tanto en la ciudad como en el puente carretero, que en conjunto representan el 93% de las actas que llegan al Tribunal de Faltas, integrado por los Juzgados I y II.

Este bajo nivel de recaudación por parte del Ejecutivo municipal, agudiza el balance presupuestario del organismo de faltas local que para estos mismos años mantuvo un gasto administrativo de casi seis millones de pesos.

A su vez, el informe firmado por el titular de la Sindicatura José Benko, da cuenta de un marcado incremento en la cantidad de sentencias que prescriben debido a que no fueron cobradas a tiempo. En el 2004 la cantidad de sentencias por infracciones que quedaron sin efecto por su vencimiento llegaron casi a las 3.000, número que no guarda relación con las 20 sentencias prescriptas durante el 2001.