BRASILIA (AFP) - Senadora combativa e izquierdista radical, Heloisa Helena se ha convertido en la sorpresa de la campaña electoral en Brasil, que puede definir los rumbos de los comicios y está empeñada en disputarle el cargo al presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
"Estoy trabajando mucho para sustituir a (Geraldo) Alckmin (el principal rival de Lula en las encuestas) en el segundo turno" y con ello disputar la presidencia frente a frente con su ex compañero de partido y actual rival, el presidente Lula, afirmó a la prensa Heloisa Helena.
Abrazada a un ramo de flores naranjas que contrastan con la dureza de sus declaraciones públicas, la senadora reaccionaba así a los resultados de las últimas encuestas.
La senadora de 44 años, expulsada del gobernante Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) de Lula en 2003 por oponerse a la política económica conservadora del gobierno, se convirtió en la sorpresa de la campaña electoral brasileña al confirmarse que pasó de 6 a 10% de la intención de voto de los brasileños (según la encuestadora Datafolha).
El auge de Heloísa Helena es clave para la campaña, porque según los analistas puede robarle a Lula los votos que necesita para ganar en la primera vuelta el 1 de octubre, y con ello provocar un segundo turno. Además, la sena
dora irrumpe en una disputa que aparentemente tenía apenas dos competidores: el favorito ex sindicalista Lula (que pasó de 46 a 44% de la intención de voto, según Datafolha) y el socialdemócrata Alckmin (que también retrocedió de 29 a 28%). El fenómeno Heloísa Helena es considerado por los analistas un voto de protesta que puede crecer todavía más, pero que será insuficiente para llevarla al segundo turno, lo que tranquiliza a los socialdemócratas de Alckmin, que la ven como una aliada indirecta que le roba votos a Lula.
"Su figura carismática, su manera de hablar, histriónica pero firme, ayudan a ampliar su electorado, hasta el punto de que puede llegar tal vez a 15% de la intención de voto, pero difícilmente la lleve a disputar un segundo turno", dijo Ricardo Ribeiro, de MCM Consultores.
"El crecimiento de su candidatura demuestra que hay espacio para una alternativa verdaderamente de izquierda en la sociedad brasileña, que ni Lula ni Alckmin representan ", afirmó el diputado Ivan Valente, un disidente del PT de Lula y uno de los líderes del Partido Socialismo y Libertad (PSOL) de Helena. Valente, que denuncia que tanto socialdemócratas como el PT de Lula fueron objeto de denuncias de corrupción en el último año en el Congreso, reconoce que la senadora enfrenta muchas dificultades para llegar al segundo turno. Estima que el objetivo básico habrá sido entrar en el debate público "mostrando que hay una alternativa al neoliberalismo".
Invariablemente enfundada en jeans, camiseta blanca ajustada, gafas y melena azabache recogida en una cola de caballo, Heloísa Helena fue electa senadora por primera vez en 1998, con lo que se dio a conocer como una combativa izquierdista defensora de las más variadas causas.
Frente a Lula y Alckmin, que abogan por la continuidad de una política económica sin rupturas con el mercado, Heloísa Helena Lima de Moraes Carvalho (que es su nombre completo) propone un radical cambio y acusa al Banco Central de estar "al servicio del capital financiero". Tampoco ha tenido problemas para oponerse a causas clásicas de las mujeres y de la izquierda. Por ejemplo, el pasado año proclamó en un debate en el Senado que "no hay nada más primitivo que el aborto" y criticó su despenalización.