Marcelo Gallardo admitió que Libertad de Paraguay superó a su equipo "en todos los sentidos", pero, insensato en el mejor de los casos, eludió cualquier autocrítica personal tras haber sido expulsado por un planchazo descalificador a Javier Villarreal.
"Libertad nos superó en todos los sentidos. Era un partido muy importante para nosotros y no nos salió nada", expresó el enganche de River en rueda de prensa tras el primer entrenamiento del plantel luego de la dura eliminación en cuartos de final de la Copa Libertadores.
Pero la autocrítica que hizo Gallardo a nivel grupal se evaporó por completo a la hora de hablar de su irresponsable expulsión por aplicarle un violento planchazo al ex Boca, que debería merecer una dura suspensión por parte de la Confederación Sudamericana de Fútbol (CSF).
"Yo me hago cargo de mis errores, pero éste no lo tomé como un error. Fui con buena intención a la pelota y llegué a destiempo, nada más. No fue por impotencia ni nada", dijo el 'Muñeco'. Nadie le creyó.
Desde luego que el periodismo fue unánime en criticar semejante demostración de salvajismo, que por otro lado perjudicó considerablemente a su propio equipo, por dejarlo en desventaja numérica en un momento clave del partido.